Sin embargo, los productos lácteos son, sin lugar a dudas, uno de los grupos de alimentos más importantes en una dieta, ya que son muy completos y equilibrados, sobre todo para el desarrollo de niños y adolescentes así como para aquellas mujeres que están embarazadas o en período de lactancia. No obstante, es vital que se consuman a todas las edades ya que aportan multitud de nutrientes, y ayudan a cuidar nuestros huesos y, por tanto, a prevenir enfermedades como la osteoporosis. Es por esto que las personas que sean intolerancia a la lactosa deben buscar alternativas en cuanto a su alimentación
Imagen: Glutnix/Flickr
Existen diferentes alternativas para aquellas personas que tengan intolerancia a la lactosa en función del grado de tolerancia de cada individuo. Así, por ejemplo, aquellos cuyo grado de intolerancia sea bajo pueden recurrir a los yogures y los quesos curados con moderación, ya que contienen una menor cantidad de lactosa. Por otra parte, existen alimentos que no forman parte de lo que se conoce como ‘lácteos’ que contienen calcio en diferentes cantidades, como las sardinas, el atún, las anchoas, el brócoli, las espinacas, la col, las acelgas, el tofu, las almendras y las legumbres.
Por suerte, cada vez son más las marcas que elaboran productos lácteos sin lactosa perfectos para estas personas sin perder las propiedades originales de la leche.
¿Conocéis a alguien con intolerancia a la lactosa?
Imagen: adactio/Flickr
Fuente: Kaiku
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