Existe una importante parte de la población que padece de intolerancia a la lactosa. La lactosa está presente en la leche de casi todos los mamíferos, vaca, oveja, cabra e incluso en la humana.
La lactosa no se encuentra únicamente en la leche y sus derivados, también se la puede encontrar en algunos productos debido a los conservantes, es por eso que puede encontrarse lactosa en productos como: carnes procesadas, helados, margarinas, fiambres, embutidos, salsas, sopas instantáneas, medicamentos, etc.
¿Qué es la intolerancia a la lactosa?
La leche es la secreción blanquecina de las glándulas mamarías de las hembras de los mamíferos, es de alto contenido nutricional, grasa, iones, agua y minerales. No obstante, también produce reacciones inesperadas como el desarrollo de intolerancia a la lactosa, que se presenta en los pequeños a partir de los tres años de edad.
Esta se presenta cuando en el intestino delgado hay carencia de la enzima lactasa para digerir el azúcar de la leche y los productos lácteos, conocida como lactosa.
La intolerancia a la lactosa se detecta alrededor de los tres años por el pediatra quien debe de cambiar el alimento lácteo o suspenderlo, por otra parte, la intolerancia se manifiesta con todos sus síntomas en los adultos a una edad promedio de veinte años.
Este padecimiento es común, en las personas de raza asiática, africana y nativos americanos, es poco frecuente en la raza europea. Las causas de la intolerancia a la lactosa se asocian también a la cirugía del intestino, infecciones causadas por virus, bacterias y parásitos, consumo de leche “bronca” sin hervir, problemas celíacos y otros trastornos gástricos.
Señalar que la intolerancia a la lactosa es una afección de las microbellosidades intestinales, esto debido a que el organismo produce poca o nada enzima lactasa, algo interesante es que después de unos estudios realizados por investigadores estos se dieron cuentas que existen dos tipos de esta Intolerancia, y es:
la de orden hereditario,
y la adquirida o temporal.
Intolerancia a la lactosa permanente
Esta es determinada por la genética de la persona, frecuentemente es diagnosticada en la etapa adulta, se puede decir que es hereditaria y permanente causada por reacción negativa a este componente en el organismo, y en ocasiones puede ser diagnosticada a tribus y razas en general, existe un tipo de intolerancia que colocaremos en este grupo ya que es de orden genético y se presenta en la infancia:
• Intolerancia congénita de la lactosa: Es un desorden genético que impide la producción enzimática de lactasa, Esta presente desde el nacimiento del bebe y esta se puede diagnosticar desde la infancia temprana, Esta se encuentra muy ligada a la raza y por lo tanto esta puede ser transmitida de generación en generación.
Intolerancia a la lactosa Temporal
Se puede tratar de una deficiencia relativa y transitoria, (no hereditaria) debido a diferentes patologías como por ejemplo la malnutrición, o reacción a algún medicamento, siendo de este modo una afección digestiva que puede ser controlada y eliminada, los casos más comunes según las estadísticas son Infecciones gastrointestinales, Medicamentos, y enfermedades crónicas del intestino delgado.
Causas de la intolerancia a la lactosa
La lactasa es una enzima que facilita que la lactosa se descomponga en azucares más simples en el intestino delgado, lo que permite su absorción. Si el organismo no produce la suficiente lactasa o esta no cumple con su misión de degradar a la lactosa, se produce la intolerancia a la lactosa.
Las causas de intolerancia a la lactosa pueden ser:
Genéticas esta es la causa más frecuente de intolerancia a la lactosa, alrededor de un 70 % de las personas que la padecen. Esta intolerancia comienza a producirse en el periodo de lactancia. El organismo va progresivamente dejando de producir lactasa. Una forma de terminar con la intolerancia a la lactosa es retirar los lácteos de la dieta.
Secundarias: la intolerancia a la lactosa puede deberse a que la mucosa intestinal esta agredida por diferentes razones como: consumo de antibióticos, quimioterapia, celiaquía, cirugías en el intestino delgado, etc.
Síntomas
La intolerancia a la lactosa se presenta con signos que no pasan inadvertidos y se manifiestan alrededor de 30 minutos después de consumir productos lácteos, la eliminación de la ingesta de estos productos alivia el padecimiento. Los síntomas se asocian con ruidos, distensión abdominal, cólicos abdominales, diarrea, gases/flatulencia y náuseas.
Los indicios pueden confundirse con otra enfermedad, como el síndrome de colon irritable, por lo tanto, el médico puede recomendar exámenes específicos para descartar otro padecimiento. Con base en el resultado de los análisis de laboratorio el médico puede señalar el consumo de leche de soya, lactasa en comprimidos y leche deslactosada, para conservar una fuente natural de calcio, vitamina D, riboflavina, otras vitaminas y proteínas que contiene la leche.
¿Cuáles son los síntomas de la intolerancia a la lactosa?
La sintomatología de este padecimiento puede ser tras la ingesta de productos lácteos, y alimentos que contengan este elemento en su composición, hay que destacar que los síntomas que presentamos a continuación puede variar dependiendo de la cantidad de lactosa consumida y dependiendo del nivel de la intolerancia a la lactosa de cada individuos, los síntomas más comunes son:
Cólicos abdominales
Distensión abdominal
Inflamación abdominal
Mala absorción
Flatulencias (gases)
Dolor abdominal
Retortijones
Pérdida de peso
Desnutrición
Crecimiento lento
Diarrea o heces de consistencia blanda
Diarrea copiosa
Heces flotantes y con olor fétido
Estreñimiento y defecación con ardor
Erupciones cutáneas
Náuseas
Existen distintos grados de intolerancia a la lactosa, hay personas que tienen síntomas por haber consumido cantidades mínimas de leche. Otras en cambio necesitan hacer una ingesta mayor para tener síntomas de esta dolencia.
Si presenta estos síntomas pregunte a su médico de cabecera.
Tratamiento
Si se padece de intolerancia a la lactosa se debe o no suprimir el consumo de leche y productos con lactosa según el grado de intolerancia que se tenga. Hay personas que pueden seguir consumiendo leche sin lactosa, aunque se deben evitar productos manufacturados que tengan conservantes con lactosa.
Si no se consume leche, se deben consumir otros productos ricos en calcio como:
Tofu
Judías
Brócoli
Salmón
Gambas
Espinacas
Esperamos que este posteo te haya sido de utilidad.