Desde siempre se ha dicho que nuestro inconsciente es entre el 95 o 97% de lo que realmente somos, de nuestro ser y el 3 o 5% es la parte consciente, lo que nos indica que no escogemos ni la ropa que nos ponemos cada mañana, sino que es el inconsciente el que la escoge, porque el inconsciente tiene toda la información almacenada desde antes de nacer hasta el momento presente, es nuestro disco duro donde está toda la información almacenada.
Entonces, sabiendo que el inconsciente es el que realmente nos dirige y nos guía, por mucho que conscientemente una persona o una pareja quiera quedarse embarazada, si el inconsciente tiene bloqueos o alguna información propia o heredada de algún familiar, antepasado o ancestro que le impida quedarse embarazada, no se podrá quedar embazada, aunque muchas veces con fecundación in vitro o con otras maneras forzadas se pueda conseguir.
Ahora bien, vamos a ver algunos ejemplos de las preguntas que podríamos realizar a nivel consciente:
¿Quieres ser mamá?
¿Quieres quedarte embarazada?
¿Quieres tener hijos o hijas?
¿Quieres tener hijas o hijos con tu pareja actual?
¿Tienes una fecha en concreto para querer ser madre?...
Lo más seguro es que la respuesta sea afirmativa a nivel consciente y que quieras ser mamá, quedarte embarazada y tener hijos con tu pareja actual. Pero si se lo preguntamos al inconsciente seguramente que nos dirá todo lo contrario en alguna de las opciones antes escritas.
Entonces es cuando conectando con el inconsciente de una manera muy sencilla y rápida, realizando las preguntas anteriores, nos dice lo que de verdad está pasando en caso de no poder quedarte embarazada. Puede ser alguna experiencia propia que conscientemente no se recuerde o bien puede ser información de padres, abuelos o incluso de más arriba de nuestro árbol genealógico lo que está impidiendo el poder quedarse embarazada y obteniendo a nivel inconsciente las respuestas se puede transcender toda la información e ir liberando y sanando todos los impedimentos y bloqueos.
A parte de toda la información propia o heredada, tanto a nivel mental, emocional o espiritual también hay que mirar la parte física, por lo que hay que mirar toda la parte sexual y reproductora que esté en pleno funcionamiento. Esto no quiere decir que algún órgano o glándula esté dañado o afectado, lo que indica es que no está funcionando al 100% de sus posibilidades.
Una vez equilibrada la persona, igual femenina como masculina, en todas las áreas anteriormente mencionadas a nivel físico, mental, emocional o espiritual, en el 90 o 95% de casos, no tiene que haber ningún problema en el tema de fertilidad.
Vamos a poner algunos ejemplos para que se vea más claro a nivel físico. En las mujeres podemos hablar del útero, la vagina, los ovarios, las Trompas de Falopio, etc. En los hombres: la próstata, los testículos, el semen, cantidad de semen, velocidad del semen, etc. En la parte emocional, que muchas veces es heredada de madres y abuelas: partos dolorosos, dejar de ser libre por tener que cuidar a un hijo no deseado, ser un hijo no deseado, violaciones, maltratos, morir al dar a luz, mala relación con los padres, etc.
Todo lo que existe es energía, así que somos energía, vibramos y resonamos. Por lo tanto, corrigiendo y trascendiendo esa energía y esa vibración, trascendimos la información y cambiamos nuestra energía e información y se liberan los bloqueos que impedían poder tener hijos e hijas, ser mamá o quedarte embarazada.
Nota: El artículo ha sido publicado originalmente en Saludterapia.