Formas fáciles para mejorar la postura en el escritorio
Practicar una mejor postura mientras estás en tu escritorio en el trabajo o en casa, es una excelente manera de ser consciente de tu salud a diario, y hay algunas formas rápidas de mejorar tu postura a medida que avanza. tu jornada laboral. Presta atención a tu postura y trabaja de manera más inteligente, con estas formas fáciles para mejorar la postura en el escritorio.Cambia tu asiento
Tu asiento puede hacer o deshacer tu postura, literalmente. Sentarse con poco o ningún respaldo para la espalda, sillas gastadas y trabajar desde tu sofá o cama puede desgastar tu cuerpo con el tiempo, forzando tus hombros, columna vertebral y espalda baja.Si tu silla de escritorio no tiene el apoyo que necesita para sentarte cómodamente y en posición vertical durante una o dos horas a la vez, es posible que debas cambiar tu asiento. Una buena silla ergonómica para tu espacio de trabajo tendrá soporte lumbar para ayudar a la mitad de tu espalda, donde va la mayor parte de la tensión cuando estás encorvada sobre tu escritorio.
Toma descansos frecuentes para estirarte
Estar sentada por mucho tiempo puede tener efectos duraderos no solo en la espalda, sino también en la salud en general. Convierte en una prioridad levantarte y moverte con regularidad durante la jornada laboral para aliviar un poco el cuerpo de estar sentado y mirar una pantalla todo el día.Establece un horario diario para alejarte un poco del escritorio para que puedas darle a tu espalda un descanso de sentarte en una posición erguida, ejerciendo más presión sobre tu columna vertebral.
Es fácil concentrarte en tu día de trabajo y olvidarte de moverte, así que configura una alerta en tu calendario de trabajo o en tu teléfono como un recordatorio regular para tomar un descanso y cambiar tu postura dando un paseo.
Ejercicio para una mejor postura
Cuando hacemos ejercicio, a menudo nos olvidamos de hacer ejercicio para tener una mejor postura, especialmente a medida que el trabajo desde casa se vuelve más frecuente. Tu postura es clave para una mejor salud en general, y tomarte el tiempo para concentrarte en ella durante tu jornada laboral puede ayudar a prevenir problemas corporales de por vida.Hacer ejercicio durante la jornada laboral para tener una mejor postura puede ser tan simple como estar de pie durante una hora o dos a la vez en tu escritorio, estirar y rotar el cuello para aliviar algo de la tensión de las horas de trabajo o conseguir una buena flexión de la espalda en la cintura para aflojar esa espalda baja.
Mantén tu espacio de trabajo al nivel de los ojos
Inclinarse sobre tu escritorio para mirar tu portátil o escribir es uno de los indicadores clave de una mala postura. Si tu portátil no está al nivel de los ojos, es fácil encorvarse y quedarse atascada trabajando de esa manera durante horas.Haz una evaluación general de tu espacio de trabajo, incluida tu portátil, tu monitor, tu escritorio y los accesorios, como el teclado y el mouse; para asegurarte de que estén al mismo nivel que la vista y el cuerpo para asegurarte de que no está forzando el cuello ni los hombros. Y vuelve a utilizar tus dispositivos. Cambia la posición de tu espacio de trabajo para que sea más fácil sentarse erguida sin dejar de ser eficaz durante todo el día.
Practica la atención plena a tu postura
Puede ser difícil tomar un descanso para almorzar o tomar una segunda taza de café durante la jornada laboral cuando estás haciendo malabarismos con correos electrónicos y reuniones; y mucho menos ser consciente de cómo se siente su cuerpo.Tomarse el tiempo para conectarse con tu cuerpo de vez en cuando a lo largo del día para ver cómo se siente puede parecer otro elemento de tu lista de tareas pendientes; ¡pero tu espalda definitivamente te lo agradecerá!
Practica ser consciente de tu postura durante la jornada laboral estableciendo recordatorios frecuentes en tu teléfono para controlar tu cuerpo.
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Mantén los pies apoyados en el suelo
Cuando tus pies están apoyados en el piso y correctamente nivelados, el peso de tu cuerpo se distribuye uniformemente a lo largo de tus caderas. Mantener los pies apoyados en el suelo también te hace más consciente de la postura general de tu cuerpo, ya que inconscientemente te hace enderezar.Practica mantener los pies completamente en el piso durante períodos de tiempo más prolongados en lugar de elevarlos con un reposapiés o cruzar las piernas a la altura de las rodillas debajo de tu escritorio.