Las especies causantes son Gyromitra esculenta y Gyromitras sp. En otros tipos de setas puede existir confusión por que a simple vista pueden tener un parecido a setas comestibles, pero en este síndrome, las setas del género Gyromitras son una especie con una morfología muy característica que no tiene posibilidad de confusión.
El periodo de incubación de este síndrome es usualmente largo, aparecen los primeros síntomas de 6-9 horas a varios días si se produce por ingestas sucesivas, y varia en función de la edad del consumidor.
¿Cómo podemos saber si nos hemos intoxicado por el consumo de este tipo de setas?
Hay que tener en cuenta los primeros síntomas y acudir a un centro médico lo antes posible, los síntomas son:
§ Síntomas digestivos, habitualmente de escasa intensidad, náuseas, vómitos y diarreas con dolor abdominal cólico.
§ Trastornos del Sistema Nervioso Central (SNC), con vértigos, agitación, delirios, convulsiones, obnubilación, somnolencia, estupor y coma.
§ Hepatotoxicidadcon ictericia y elevación de las transaminasas. Suele ocurrir trascurridos unos días.
§ Crisis hemolíticas con emisión de orinas oscuras (coluria), anuria y posible fracaso renal.
En resumen, el síndrome giromitriano cursa con un cuadro gastrointestinal de náuseas, vómitos y diarrea persistente seguido de una crisis hemolítica aguda, ictericia, hepatotoxicidad, encefalopatía con convulsiones y disminución de la conciencia hasta el coma y, finalmente, colapso cardiocirculatorio y muerte a los 2-4 días.
¿Cuál es la causa?
El ácido helvellico, al que se atribuía antiguamente la toxicidad de las giromitras, es una mezcla de ácidos carboxílicos y queremos destacar que no es tóxico.
El cuadro tóxico se debe a un grupo de hidracinas que son hidrosolubles y volátiles, de las cuales la más abundante es la giromitrina. En el organismo, por hidrolisis, la giromitrina se transforma en Monometilhidracina (sustancia mutagénica y cancerígena) que actúa bloqueando todos los procesos metabólicos que tienen como coenzima el fosfato de piridoxal. Por ello produce una afección multisistémica: cardiocirculatoria, neurológica, hepática y renal, acompañada de hemolisis.
La intoxicación se produce si se consumen estas especies crudas, poco cocinadas, hervidas menos de 10 minutos, o servidas con el agua de la cocción.
Hace unos años la Gyromitra esculenta se vendía seca en los mercados de Francia y de este modo era considerada como una especie comestible. Su venta fue prohibida en octubre del año 1991. Hay que desechar absolutamente el consumo de esta especie, incluso seca o bien cocinada ya que puede causar intoxicaciones mortales.
Sus toxinas son acumulativas y los niños son más sensibles a las mismas que las personas adultas.
Vistos los síntomas, ahora pasamos al tratamiento. Éste debe ser rápido y llevarlo a cabo ante la sospecha del consumo de estas setas o bien ante la aparición de los primeros síntomas.
El tratamiento es sintomático y de soporte. Puede ser útil el aspirado o lavado gastrointestinal continuo. Además, se debe aportar abundante líquido, forzar la diuresis y el uso de vitamina B6o piridoxina por vía intravenosa a dosis altas (2 ampollas de 300 mg de Benadon®).
Como siempre os decimos, consumir sólo aquellas setas que conocéis y que no son tóxicas, y ante cualquier duda lo mejor es comprarla en los mercados, ya que son especies que han pasado controles y claramente se pueden consumir.
Con esto me despido, ¡hasta próximos post!
Realizado por Jorge Ibarra Morato
Fuentes
Conocimientos adquiridos durante la Diplomatura de Nutrición Humana y Dietética.
Setas tóxicas e intoxicaciones. Pedro Arrillaga Anabitarte y Xabier Laskibar Urkiola. Volumen 22 Munibe - Aranzari. 2006