Utilizada desde tiempos remotos como remedio medicinal y terapéutico, por su agradable sabor y como un endulzante, la miel, sigue estando reconocida, hoy en día, un mágico elixir muy beneficioso para la salud y la belleza.
Hoy en día, podemos disfrutar de diferentes tipos de miel, dependiendo de la planta de orígen y de la recolección, pero todas beneficiosas. Así que hoy, me gustaría hablar, al menos, de las más destacadas y de sus características.
Diferentes tipos de miel
Miel Mil Flores: Formada a partir de varias flores con un sabor intenso. Esta miel es un complemento alimentício perfecto: energizante, antimicrobiana, antiséptica, digestiva y muy recomendada como edulcorante.
Miel de Romero: Sabor dulce y un agradable aroma característico del romero, de color ambar y espesa. Es una miel ideal para insuficiencias hepáticas, para resfriados, afecciones de garganta, bronquitis e incluso el asma, contra la ácidez estomacal, digestiones pesadas y flatulencias. Su efecto tonificante se aprovecha para cuadros de agotamiento físico, cansancio mental, astenia y mejora la concentración y la memoria.
Miel de Tomillo: De color más rojizo y el aroma y sabor característicos del tomillo, esta miel nos ayuda a controlar la tensión arterial, a recuperar la energía, sus propiedades antisépticas nos ayudan a prevenir y a combatir infecciones, como las del aparato respiratorio y digestivo; calmar la tos, la sinusitis, la fiebre, resfriados y gripes. Es digestiva, contra la ácides estomacal y diarreas. Su contenido en hierro la hace ideal para tratar cuadros anémicos.
Miel de Azahar: Una miel muy densa, de color amarillo muy pálido y con el aroma delicado del azahar. Su origen está principalmente en las flores del naranjo y del limonero. Es antiespasmódica, regula la función del estómago y un gran relajante. La miel de azahar es sedante y calmante, lo que la convierten en un buen remedio para tratar el insomnio, el estrés, la ansiedad y el nerviosismo.
El aroma, el color, el sabor y textura de la miel dependen de la planta de origen y del lugar donde las abejas realizan ese proceso alquímico natural
Miel de Pino: Una miel de bosque, menos dulce y más oscura. Muy beneficiosa para enfermedades del aparato respiratorio, destacando su capacidad expectorante. Su alto contenido en sales minerales benefician en caso de diarrea o cuadros anémicos.
Miel de Avellano: Amarilla y con un buen sabor, la miel de avellana, al igual que sus hermanas, es otro buen energizante que además mantiene el equilibrio y buen estado de salud de la piel.
Miel de limón: Con un color, sabor y aroma muy parecidos a los de miel de azahar, a parte de tener un efecto sedante leve, esta miel es perfecta para casos de desmineralización ósea.
Miel de tilo: De color amarillo suave y una fragancia exquisíta, esta miel posee propiedades sedantes, antibacterianas, expectorantes y diuréticas. Relaja, ayuda a dormir, se puede hacer uso de ella para tratar infecciones del aparato respiratorio, del aparato respiratorio e incluso para calmar los dolores menstruales.
Y para terminar, si nunca tenéis oportunidad, no dejéis de probar las deliciosas mieles que se elaboran el el Pirineo ;-)
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