El sistema inmunológico es nuestra barrera natural. Es lo que impide que las enfermedades pasen a nuestro organismo. Si nuestro sistema inmunológico esta fuerte estaremos muy saludables y libres de toda enfermedad.
Los enemigos de nuestro sistema inmunológico son:
La alimentación inadecuada
Las emociones negativas
Falta de actividad física.
A lo largo de este posteo desarrollaremos en profundidad cuales son los enemigos de nuestro sistema inmunológico.
¿Que debilita nuestro sistema inmunológico?
Una alimentación inadecuada
Nuestro organismo se nutre obviamente de lo que comemos. Es sencillo se no nos nutrimos debidamente nos enfermamos. Existen alimentos que atentan contra nuestro sistema inmunológico. Los referidos alimentos son:
Las harinas refinadas
los cereales azucarados y procesados
conservantes, colorantes y aditivos
los refrescos azucarados
el azúcar blanca
los dulces
alimentos congelados, embutidos, alimentos en conserva con un alto contenido de sodio.
El consumo habitual de este tipo de alimentos, traerá como resultado el debilitamiento de tu sistema inmunológico.
Las emociones negativas
El estrés, la ansiedad y los nervios son emociones negativas que hacen mella en nuestro organismo. Estas perjudican nuestra salud, disminuyen nuestras defensas, y debilitan a nuestro sistema inmunológico.
Este punto tiene una estrecha relación con el punto anterior. Cuando el organismo esta desequilibrado pide cierto tipo de alimentos, que hacen que todo se desequilibre más aún. Cuando se tiene cierto nivel de ansiedad nos e piensa en la comida sana. Sino más bien todo lo contrario, en esos casos el cuerpo no pide una deliciosa sopa de verduras sino chocolate, helado, comida chatarra. Y todo lo que sea grasoso, híper dulce y sumamente engordante.
El poder controlar el estrés, la ansiedad y los nervios, fortalecerá sobremanera tu sistema inmunológico y te hará una persona mucho más saludable.
La falta de actividad física
El ser personas sedentarias no nos trae más que problemas de salud. Esto provoca sobrepeso, patologías cardíacas, problemas de circulación, diabetes, etc. La lista es larga, larguísima. La actividad física en cambio nos trae un sin número de beneficios.
Si no te apetece, o no puedes ir a un gimnasio hay otras maneras de hacer actividad física. Puedes caminar, montar en bicicleta, subir escaleras, nadar, etc.
Unos 15 minutos de ejercicio al día te mantendrán muy saludable, y evitarán que tu sistema inmunológico debilite.
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