De su experiencia extrae estos puntos claves para iniciar en el autoconocimiento a cualquier mujer.
¿Conocemos las mujeres nuestra vulva y genitales externos?Hasta un 50% de las mujeres no conoce su propia anatomía ni cómo funcionan sus partes íntimas, y hasta el 80% de las que están en edad reproductiva no saben qué partes de su cuerpo participan en la respuesta sexual. Son datos que ponen de manifiesto que, en cuestión de autoconocimiento, aún nos queda mucho terreno que recorrer. En consulta muchas veces sorprende que las pacientes se autoexploren y piensen que están tocando anomalías que no son más que partes normales de su propia anatomía íntima.
¿Cuántas partes la forman?
La vulva está constituida por aquellas partes del aparato genital femenino que son visibles en la región perineal :
- El monte de Venus es una prominencia adiposa que está situada por encima de la sínfisis del pubis a partir de la cual se originan dos pliegues longitudinales de piel constituyendo los labios mayores, que rodean a su vez a los labios menores, formados por unos pliegues cutáneos delgados y pigmentados, con abundantes glándulas sebáceas y sudoríparas, que carecen de folículos pilosos.
- Los labios menores se unen por delante formando el prepucio del clítoris mientras que por la parte posterior se fusionan formando parte de la horquilla perineal.
- El clítoris es un órgano eréctil de pequeño tamaño situado en el borde inferior de la sínfisis del pubis, formado por los cuerpos cavernosos y sus envolturas. La separación de los labios permite observar el vestíbulo y el meato uretral (por donde miccionamos) a unos 2 cm por debajo del clítoris.
- En el vestíbulo vaginal se halla el himen, los conductos de Skene y las glándulas de Bartholino.
- El himen es una membrana cutáneo mucosa, delgada y vascularizada, que separa la vagina del vestíbulo, presentando una gran variabilidad respecto a su grosor, forma y tamaño. Los conductos de las glándulas de Skene desembocan a ambos lados del meato uretral.
- Los conductos de las glándulas de Bartholino se hallan a ambos lados del vestíbulo, a nivel del tercio medio del orificio vaginal, en la hendidura que separa el himen de los labios menores.
¿Cuáles son los principales problemas, relacionados con este órgano, por los que acuden las pacientes a consulta?
Obviando los amplios y variados temas relacionados con la patología infecciosa vulvar (hongos, vaginosis…) y la patología dermatológica (dermatitis, liquen, verrugas genitales...) de dicha zona, hoy día observamos en la práctica clínica diaria un aumento de las consultas relacionadas con la necesidad de la realización de cirugía íntima vulvar, es decir, una serie de procedimientos quirúrgicos para resolver problemas funcionales o estéticos de la región genital femenina.
Existen varios tipos de "CIRUGIAS INTIMAS" como son la LABIOPLASTIA o reducción de los labios menores; el REJUVENECIMIENTO VAGINAL: vaginoplastia o vaginoperineoplastia; la LIPOPLASTIA VULVAR o lipoescultura del área genital para moldear el monte de Venus o los labios mayores que tambien se pueden aumentar con inyección de sustancias de relleno; HIMENOPLASTIA o reconstrucción del himen desgarrado.
En este vídeo informativo realizado en nuestra clínica podréis conocer más sobre las ventajas y tipos de cirugía íntima:
Las más demandadas a día de en nuestro centro son la labioplastia y la reconstrucción de himen. La labioplastia, también llamada plastia de labios menores o ninfoplastia, se practica para reducir el tamaño de los labios menores y es indicada en aquellas mujeres que por razones congénitas (de nacimiento) o por problemas posteriores tienen los labios menores hipertróficos, a veces asimétricos o colgantes.
Algunas mujeres se practican esta cirugía porque las incomoda el roce de ciertas prendas ajustadas o porque les disgusta su protuberancia a través de telas delgadas. La solución se realiza de manera ambulatoria y con unas leves molestias posteriores, siendo el grado de satisfacción de las pacientes bastante bueno.
No podemos dejar de mencionar, aunque dada su amplitud se merece un tema a parte, la patología de suelo pélvico (cistocele-prolapso vesical, rectocele-prolapso rectal, uterocele o prolapso uterino e incontinencia urinaria de esfuerzo…) con todo lo que esto conlleva en cuanto a cambios en el aspecto de los genitales, en la actividad sexual, en la práctica de deportes, en el aspecto psicosocial…
¿Qué cosas son necesarias que sepamos sobre nuestro órgano genital?
Lo importante es que nos conozcamos, que perdamos el miedo a la autoexploración y al conocimiento de nuestro propio cuerpo, ya que sólo así seremos capaces de distinguir la normalidad de la anormalidad y de disfrutar más de nuestra vida íntima y sexual en todos sus aspectos y amplitud.
Por tanto no debemos dudar en consultar con los especialistas ante la más mínima duda, ya que existen ciertas alteraciones importantes en los genitales externos que por falta de conocimiento y de autoexploración, nos pueden pasar desapercibidas.
Aquí conviene incidir en la importancia de la realización de las revisiones ginecológicas periódicas. Estas han de comenzar desde el momento en el que se empiezan a mantener relaciones sexuales y mantener una periodicidad acorde a la edad, evolución y posibles patologías que puedan aparecer. Acude a tu ginecólogo habitual: los especialistas sabrán orientarte y aconsejarte.
¿Crees que las mujeres están satisfecha con sus partes íntimas? ¿Se avergüenzan?
Creo que en general, obviando el desconocimiento que tiene un alto porcentaje las mujeres de su anatomía íntima, existe un moderado grado de satisfacción de las mujeres con su anatomía íntima. Insisto nuevamente en la necesidad del autoconocimiento y la autoexploración. Esto nos hará disfrutar más y de una manera mas plena de nuestra vida íntima y prevenir la aparición de posibles patologías. ¡No tengáis miedo a conocer vuestra anatomía íntima!