Motivarse para ir al gym es el primer reto que hay que superar día tras día, pues es lo que nos permitirá ir expandiendo nuestra realidad física, e ir progresando sin dejar de hacer ejercicio.
“Me da flojera ir al gym”
Una frase muy común que se suele escuchar en la gente, incluso desde antes de empezar de ir al gym. Si eres de esos a los que les da flojera todo, pues no es normal, y es recomendable que comiences a cambiar tus hábitos lo más pronto posible.
Que te de flojera ir al gym es común, pero nunca hay que perdernos un día de rutina por esta oración tan absurda.
Mira, te diré un secreto. No importa si crees o no, muchos confían en el peso y poder de las palabras. Muchas veces lo que decimos, es lo que va a pasar. Por eso mucha gente triunfa desde antes de haberlo hecho, porque ya lo asumió.
Y ¿Qué quiero decir con esto? Bien, si tu dices “Me da flojera ir al gym”… ¿Adivina que pasará? Que justamente cuando tengas que ir a entrenar, no tendrás ganas.
Es por ello que debemos en primer lugar, cambiar nuestras palabras. Usar palabras todos los días motivadores, que nos ayuden a progresar y entrenar día tras día. “Hoy voy a superar mi record en el gym”, “Hoy entrenaré piernas a full”, “Esta semana iré 5 días al gym”.
Cuando comienzas a asumir cosas positivas, es cuando tu realidad cambiará y comenzarás a ver cambios buenos.
Cómo motivarse para el gym
Todo comienza quizá con las altas expectativas. Ésta es una de las razones por la cual nos cuesta mantener la motivación con el correr de los primeros meses e incluso años. Arrancamos el gym con expectativas muy altas, y al ver que la realidad y respuesta de nuestro cuerpo es otra, nos hace dudar sobre seguir o no.
Otra razón por la que nos cuesta mantener la motivación es porque se vuelve una rutina el hecho de ir día tras día a entrenar, y muchas veces en ciertas ocasiones esto nos destruye.
Aquí te voy a dejar una lista de las pautas que puedes tener en cuenta que a mí me ayudaron a mantenerme motivado siempre, y estoy seguro que te ayudarán a ti también:
Cómo no perder la motivación en el gym
Metas cortas. Si eres lector de este blog, deberás saber que suelo mencionar seguido “pequeñas victorias llevan a grandes victorias”. Bueno, esto se aplica acá! Intenta ponerte metas mas pequeñas, por más que tus ambiciones y expectativas sean mayores. Esto hará que vayas cumpliendo meta por meta, paso por paso, y así poder conseguir en un futuro, tus objetivos más grandes. Siempre es bueno sentir que las cosas que se van dando como queremos, y esto nos ayuda a evaluar si vamos por buen camino, o no. Si en vez de esto solo nos ponemos una meta grande, y en el transcurso no evaluamos nada, tal vez perderemos tiempo y sobre todo motivación, que nos lleve que a cumplir esa meta. Y perder la motivación es justamente lo último que queremos.
Así que ya sabes, metas menores, para alcanzar tus sueños. Y este punto nos lleva al siguiente…
Premiarse continuamente. Si! Debes saber premiarte también, no todo es trabajo duro, sacrificio y sudor. Cada vez que alcances una meta, por más pequeña que sea, celébralo! Y por premiarte no me refiero a salir de fiesta, emborracharte y echar a perder todo el trabajo hecho. Ni tampoco que rompas toda tu dieta de un día para el otro.
Leé historias de tus referentes. Puedes comprar libros, o leer la historia de gente que te inspire. Saber que también comenzaron de abajo, que también tuvieron sus objetivos y que son personas como tú, yo y todos. Sólo que pusieron un poquito más de voluntad, y por ello están donde están ahora. Mira videos, discursos motivacionales, todo que te llene le alma, y te den ganas de salir ahí afuera y comerte el mundo!
Ayuda a tus pares. Si estás en una situación mas avanzada que tus compañeros, ayúdales, inspíralos. Siempre es bueno dar, sin esperar nada a cambio. Después todo se equilibra al final, te lo aseguro. Tienes que dar, sin esperar nada a cambio, para luego recibir el doble cuando menos te lo esperas.
Divide tus tareas de la manera correcta: esto es hacer primero las más tediosas, o que más odies, y luego avanzar en cuestión de preferencia. Por ejemplo, apliquemos este caso en el gimnasio. Digamos que odias hacer piernas (sin comentarios al respecto jaja) y te encanta hacer bíceps. Puedes hacer al principio de tu rutina piernas, dar todo para cumplirlo, para luego saber tienes que hacer hombros, y finalmente los bíceps que tanto te gusta hacerlos… Esto te ayudará a mantener la motivación para completar el entrenamiento.
Ten en cuenta los puntos señalados, y ¡te aseguro que lograrás mantener la motivación y cumplir tus metas!
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