A la hora de hacer Mikados hemos de tener en cuenta que las varillas han de ser de bambú o ratán. Si no las encontramos podemos utilizar varillas de brocheta pero les cortaremos la punta para facilitar la absorción del perfume.
Yo en esta ocasión, no he hecho servir colorantes porque mi frasco es opaco pero si utilizais un frasco transparente podéis darle color al gusto con cualquier colorante de hacer jabón o de uso alimentario. Un sólo gramo de colorante es más que suficiente.
El alcohol es necesario ya que ejerce de difusor, siendo el encargado de expandir el aroma por todo el ambiente.
En el caso de los ambientadores no es necesario utilizar aceites esenciales, cualquier otra esencia concentrada nos sirve. En esta ocasión he optado por el jazmín y no sólo por su aroma intenso, exquisito y seductor que me pierde, sinó también porque levanta el ánimo, calma la ansiedad, libera el estrés y relaja, El jazmín crea ambientes de bienestar propicios para la relajación y meditación. Además despierta la creatividad, algo que no puede faltarme en el trabajo, y en ocasiones especiales sus propiedades afrodisíacas… ¿quien sabe? ;-)
Ingredientes
10 gr de agua destilada
60 gr de alcohol 96º
30 gr de esencia de jazmín
Elaboración
Introducimos todos los ingredientes en un recipiente y mezclamos.
Introducimos la mezcla en el frasco de cristal y colocamos los palitos.
Listo! A disfrutar del ambiente
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