Existe una gran cantidad de calzado deportivo que podemos elegir, pero por ninguna razón deberíamos comenzar eligiendo por el diseño o el precio.
Después de estar completamente convencidos y motivados de que saldremos a correr regularmente, acudiremos a una tienda de calzado o con un médico ortópedista para conocer nuestra pisada y la forma de nuestro pie.
La forma del arco del pie es de suma importancia en la consideración de la compra de calzado deportivo.
Antes de adquirirlo, debes conocer la altura de tu arco y su flexibilidad.
También es importante saber qué tipo de pisada tenemos:
-Pronador: la mayoría de las personas son pronadores en mayor o menor medida. Se conoce como pronación a cierta forma en que nuestro pie se impulsa y toca suelo. En ocasiones la pronación podría provocar algunas molestias, por lo que en este caso deberíamos consultar a un especialista.
-Neutro: las personas con pisada neutras también son bastantes. Entre pronadores y neutros alcanzan, aproximadamente, el 90% (60% y 30%, respectivamente). Ser neutro significa que la pisada no genera ningún riesgo para los huesos, los músculos y los ligamentos del pie.
-Supinador: Los supinadores constituyen la minoría y tener pisado supino resulta poco probable (frente a la creencia popular). Aproximadamente, sólo un 5 % de las personas tienen este tipo de pisada. La desventaja es que no hay calzado fabricado especificamente para los supinadores; por lo que lo mejor es usar calzado neutro sumamente flexible y bien amortiguado.
Por último, a la hora de elegir calzado para correr también debemos tener en cuenta su flexibilidad; ya que, mientras menos flexible sea, peor será, probablemente, tu técnica de carrera.
Sigue con un nuevo post en Deporte y Salud: Diferentes tipos de estiramientos
¡Hora de adelgazar, vamos!