Para sentirnos bien por dentro y por fuera no es suficiente con llevar una alimentación equilibrada, hacer ejercicio, cuidados estéticos… Nuestro estado emocional también es prioritario, y al igual que nuestro cuerpo debemos de cuidarlo y mimarlo. Dicho de otra forma, tenemos que aprender a organizar nuestra vida.
Nuestras relaciones con nuestra pareja, en nuestro trabajo, con nuestros amigos, nuestras relaciones sociales, el entorno en el que vivimos, nuestros momentos de ocio, todo esto es fundamental para que haya armonía en todas las áreas de nuestra vida,
Hemos de trabajar para mantener unas relaciones sanas, en todos los ámbitos de nuestra vida, tanto a nivel personal como laboral, es prioritario si queremos tener una vida equilibrada. Si en tu vida hay relaciones -del tipo que sean- que te están generan un nivel de intranquilidad, ha llegado el momento de plantearnos dicha relación y que es lo que nos aporta.
Tratar de pensar en dicha relación de una forma racional, analizando bien los pros y los contras sin dejar que las emociones no nos dejen ver la realidad, y obra en consecuencia. ¿De qué nos sirve tener una relación de amistad, de pareja… que nos cause sentimientos negativos y no nos deje crecer?
Debemos saber analizar cuál es el origen del problema, siendo sinceras con nosotras mismas, para de esta forma ser justa primero contigo, después con los demás.
Tenemos que aprender a controlar nuestros pensamientos para que de esta manera podamos controlar nuestras emociones.
Muchas veces seguimos manteniendo una relación -del tipo que sea- un poco por pereza y otro poco por no herir a los demás, pero ¿los demás piensan en nuestro bienestar?…Yo diría que no
Para aprender a organizar nuestra vida, lo primero es saber que necesidades tenemos, con quien estamos realmente bien y quien nos causa emociones encontradas. Es difícil tomar según qué tipo de decisiones, pero Chic@s, hemos andado mucho camino como para ahora vivir con dudas, miedo, tristeza, vacío, enfadadas con el mundo etc.
Tomémonos un tiempo para pensar en todo esto y seguramente descubramos que no es tan difícil tomar una decisión.
No debemos dejar que la vida o las personas nos arrastren como si fuésemos marionetas.
Incluso aunque haya veces en que las circunstancias un tanto difíciles nos aten, hemos de ser capaces de tomar nuestras propias decisiones.
Para aprender a organizar nuestra vida lo primero que hemos de controlar son las emociones negativas, para de esta forma poder concentrarnos en nuestras decisiones. Emociones como ira, malestar, tristeza, irritabilidad son una carga emocional que debemos desechar cuanto antes de nuestro vocabulario.
Dormir bien, hacer ejercicio como yoga y pilates, que están basados en controlar la respiración y en la meditación, nos ayudaran a sentirnos más serenas, en paz con nosotras y disminuirán el estrés negativo en nuestra vida.
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Un saludo
Mari Carmen.
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