Desde alimentos hasta enfermedades, puede haber todo tipo de causas para la halitosis.
¿notas un gesto de asco en las personas inmediatamente que abres la boca? Si has comido una pizza de ajo y cebolla, una hoja de menta o en su defecto un caramelo de menta puede disimular tu aliento.
Pero si sufres de halitosis de forma regular, hay muchos factores que podrían estar causando tu mal aliento.
Aquí hay unas cuantas de las razones que podrían explicar el motivo de ese aliento tan desagradable y algunas soluciones que pueden poner remedio a dicha situación.
Causas de halitosis
Alimentos: Hay algunos alimentos en particular, como la cebolla cruda, ajo, col y algunas especias, que luego de la digestión, llegan hasta los pulmones desde el torrente sanguíneo, afectando el aliento.
Para mantener la respiración normal, reduce el consumo de los alimentos que desencadenan los olores en la boca.
Mala higiene bucal: A menudo causada por bacterias que crecen en la boca.
Cuando se descompone la comida, algunas pequeñas partículas pueden permanecer en la boca y causar más bacterias, especialmente al no cepillarse y usar hilo dental con la frecuencia suficiente.
Formando una placa en forma de capa pegajosa de bacterias en los dientes.
El uso del cepillo por lo menos dos veces al día, especialmente después de comer, así como también el hilo dental.
El dentista puede recomendarte un enjuague bucal o crema dental para ayudar a combatir las bacterias y la acumulación de placa.
Así podrás remediar el problema de halitosis
Prótesis dentales: Del mismo modo, las prótesis u otros aparatos orales que no se limpian bien o que no encajan adecuadamente pueden ofrecer un hogar cómodo para las partículas de alimentos y bacterias que causan malos olores y mal aliento.
Asegúrete de mantener los aparatos limpios y comprueba regularmente que su ajuste sea el adecuado.
Las caries y otros problemas de la boca: Cuando tienes problemas en la boca, incluyendo cavidades, abscesos en los dientes, encías o llagas en la boca, las bacterias pueden prosperar y provocar mal aliento.
Consulta con tu dentista regularmente para asegurar que no tienes ningún problema subyacente.
Sequedad en la boca: La saliva ayuda a limpiar la boca, eliminar las células muertas y neutralizar los ácidos.
Cuando estas células no son eliminadas o los ácidos no se neutralizan, el resultado puede ser halitosis.
La boca seca se da de forma natural cuando duermes, agravando el problema si duermes con la boca abierta.
También puede ser un efecto secundario de medicamentos, enfermedades o problemas de la glándula salival.
Para evitar la sequedad en la boca, bebe mucha agua y mastica chicle sin azúcar o consume caramelos sin azúcar.
Si tu problema es crónico, el médico o dentista pueden recetar medicina para estimular el flujo de saliva.
Objeto atascado: Esto es más de una cosa de niños, pero cuando algo se aloja, bien en la nariz u otra parte (¿un guisante?), puede causar una descarga maloliente, con el consiguiente mal aliento.
Reflujo gastroesofágico: En algunas personas que sufren de enfermedad por reflujo gastroesofágico, los alimentos permanecen en el estómago y se pudren, provocando mal aliento.
O a veces las personas con reflujo pueden regurgitar minúsculos pedacitos de alimentos no digeridos, que también puede causar mal aliento.
Si sospechas de ERGE, consulta con tu médico por el mejor tratamiento.
Medicamentos: Algunos medicamentos, como antidepresivos, diuréticos y aspirina, pueden afectar mal aliento contribuyendo a sequedad de boca.
Beber mucha agua con medicamentos, los chicle sin azúcar o caramelos sin azúcar pueden ayudar a combatir la sequedad en la boca.
Infecciones del tracto respiratorio: Bronquitis, sinusitis, neumonía y otras infecciones de las vías respiratorias descomponen los tejidos, causando flujo de moco y células que alimentan a las bacterias causantes del mal olor.
Incluso el goteo nasal puede causar mal aliento.
Si se trata de un problema crónico, consulta con tu médico para el tratamiento.
Productos de tabaco: Fumar o masticar tabaco causan aliento hediondo muy característico.
Además, las partículas de tabaco pueden alojarse en los dientes, contribuyendo al crecimiento de las bacterias.
Las personas que usan tabaco también son más propensas a la enfermedad de las encías, que es otra fuente de mal aliento.
Sugerencia: Dejar de fumar!
Otras enfermedades: Aliento con olor fuerte puede ser un signo de enfermedades específicas como la diabetes, hígado o problemas renales.
También puede provenir de problemas con las amígdalas.
Lo mejor es consultar al médico para descartar cualquier problema de salud subyacente que pueden estar contribuyendo a los olores de la boca.
Alcohol: Beber mucho alcohol puede secar la boca, que contribuyen al mal aliento.
Reducir su consumo o abastecerse de mentas para la halitosis.
Posiblemente existan otras, así que cuento con tu ayuda para enriquecer la entrada y que le pueda ayudar a más personas.
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