No te sientas mal.
Estás a dieta.
Te restringes comida, pasas hambre y logras tu cometido:
Bajas esos kilos que te fastidian.
Pero cuando vuelves a tu rutina normal.
¡PUM! Lo recuperas en un santiamén.
Incluso hay casos muchos peores.
El efecto rebote es tan demoledor que incluso puedes llegar a aumentar muchos más kilos que los que tenías antes de empezar la dieta.
Esta realidad es más común de lo que te imaginas. No creas que se trata de que tienes mala suerte.
Son millones las mujeres y hombres que tienen este mismo problema.
Todos queremos lucir espectaculares, sin rollitos. Pero son muy pocos los que de verdad se comprometen.
A la gran mayoría les gusta la vía fácil:
El perder los kilos rápidos.
Pero así no funcionan las cosas. Y así no es como funciona tu cuerpo.
Si quieres ponerte a dieta debes primero comprometerte. Luego entender que es un objetivo a largo plazo. Debes tener mucha paciencia.
¡Y muy importante!
Evitar los errores que arruinan tu progreso.
Los errores son más comunes de lo que crees
La verdad es que las personas cuando se ponen a dieta cometen muchos errores.
Incluso hasta la misma persona se da contra la misma pared varias veces.
Una vez que recuperan los kilos. Comienzan una nueva dieta, llena de privaciones y la historia se repite una vez más.
Y así sucede una y otra vez.
A veces parecemos hasta tontos.
Por ahí dicen que somos el único animal que se tropieza con la misma piedra dos veces.
¡Y hasta 3 o más!
Fuente: Pixabay
También sucede de las personas que comienzan una dieta y a los 3 o 5 días ya las abandonan. Y el lunes el ciclo se repite.
A esto se le llama la dieta de los lunes.
Quizás hasta tú has sido así. Pero el círculo vicioso se repite una y otra vez.
Para evitar que siga sucediendo. Hemos decidido en Full Músculo realizar un post en el que recopilamos los 10 errores más comunes que cometen las personas cuando realizan una dieta.
Los 10 graves errores que debes evitar porque te están arruinando el progreso a la hora de bajar de peso.
10 graves errores al hacer una dieta de adelgazamiento
1) Hacer un desayuno demasiado escaso y cenar en abundancia
Los nutricionistas recomiendan exactamente lo contrario:El desayuno debe aportar buena parte de las calorías del día. Mientras que la cena tiene que ser ligera.
Mientras más y mejor desayunes es lo ideal.
Eso sí. Tienes que poner mucha atención en lo que desayunas. No se trata de llenarte de grasas con tocineta o comidas fritas.
Por el contrario debe ser un desayuno muy nutritivo.
Las proteínas deben ser las reinas del plato.
Dale prioridad a los huevos, ya sean cocidos o en tortilla. Tampoco olvides el yogurt o la avena. La fibra también es necesaria.
Una buena porción de frutas como la fresa y los arándanos son una gran opción. Lo ideal es que mezcles diferentes tipos de nutrientes.
También necesitas carbos. Pero los saludables como los del pan integral.
Recuerda que no todos los carbohidratos son iguales, hay que aprender a diferenciarlos.
De esta forma tendrás mucha energía y todas esas calorías las vas a quemar en el resto del día.
Mientras mejor desayunes menos posibilidades tienes de que aparezcan los antojos a media mañana. Ya que te vas a sentir satisfecha por mucho tiempo.
Fuente: Pinterest
2) Ponernos a régimen solamente en determinadas épocas
¿Cómo funciona eso?Pues hay muchas personas que se ponen a dieta antes del verano, después de Navidad…. La clave está en aprender a comer bien.
Una vez alcanzado el peso deseado mantenerlo durante todo el año.
Por eso hemos hablado de que más importante que ponerse a dieta es tener una alimentación saludable. Además de buenos hábitos alimenticios.
Eso se debe mantener durante todo el año.
De esta forma vas a estar muy saludable siempre y en tu peso ideal.
Esas dietas por épocas y estrictas lo único que hacen es daño a la salud. Ni hablar del efecto rebote.
3) Pesarnos cada día si estamos a dieta
Lo peor que puede hacer es obsesionarte con tu peso. No te va a ayudar para nada.De hecho vas a aumentar el cortisol, que es la hormona del estrés.
De acuerdo a un estudio de Celso Cortés, una persona normal secreta entre 10 y 20 gramos de cortisol al día.
Pero esto puede aumentar. Ya que cualquier situación de estrés la lleva a elevarse rápidamente.
¿Sabes lo que ocurre cuando estás estresada?
Sí, ¡comes y mucho!
No dejas de comer, una y otra vez.
Si te martirizas en pensar que “solo” perdiste 100 gramos no bajaste nada. No te vas a sentir bien y vas a querer un dulce.
Ni hablar si ves que perdiste muchos kilos. Vas directo por un dulce como recompensa. Y allí vienen los problemas otra vez. en definitiva, menos estrés significa menos kilos.
Con una vez a la semana que te peses basta.
Eso sí, siempre en la misma báscula. En el mismo momento del día y, a ser posible, sin nada de ropa.
De esta forma podrás conocer mejor los kilos que tengas. La ropa va sumando buenos gramos que no ayudan para nada.
Y complementalo con fotos frente al espejo.
Ya que muchas veces el peso no te está contando toda la verdad.
Sobre todo cuando estás entrenando con peso, ya que el músculo pesa más que la grasa y pudiera parecer que estás estancad@ cuando no es así.
Puedes estar perdiendo grasa y ganando masa muscular y por esa razón sigues pesando lo mismo a pesar de todo el esfuerzo que haces.
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4) No realizar ningún deporte, ejercicio o actividad física
Si quieres bajar de peso o mantenerlo es muy importante que realices ejercicios.Así lo recomienda la Aranzazú Aparicio, quien es profesora en la Universidad Complutense de Madrid.
Además debes acompañarlo con una buena alimentación.
Los ejercicios cardiovasculares te ayudarán a quemar grasa mucho más rápido.
Lucirás un gran cuerpo, con un abdomen plano y esto es posible solo con una rutina que debes cumplir.
Como un agregado:
Tu cuerpo se va a sentir mucho mejor. Tu corazón estará fuerte y sano. Tus niveles de colesterol bajarán y todo ello ayudará con tu dieta.
No se trata de que tengas que pasar horas en el gimnasio.
No, no es necesario.
Aunque sea media hora al día debes dedicarla a hacer ejercicio. Ya sea en un gimnasio o siguiendo en casa una sencilla tabla gimnástica.
Fuente: Pinterest
5) No beber suficiente agua
No solo las personas que están a dieta cometen este error.La población en general no toma la cantidad de agua que necesita.
Algunas personas incluso no beben ni siquiera un vaso.
En cambio las bebidas gaseosas y los jugos pasteurizados es lo que llevan a su organismo.
Puras calorías vacías sin ningún valor nutricional es lo que aportan ese tipo de bebidas a tu organismo.
Mejor cambia tus gaseosas por jugos naturales que te aporten menos calorías, menos azúcar y más nutrientes.
Pero las personas que están a dieta y que además hacen ejercicio deben aumentar esta ingesta.
Porque su cuerpo tiene una necesidad diferente al resto de la población.
Además le permitirá eliminar la grasa a través de la orina y evita la retención de líquidos.
El agua no posee calorías. Por ello no te tienes que preocupar por la cantidad que bebas.
6) Confiar en los laxantes y en los diuréticos para adelgazar
No tienes ni idea del daño que le haces a tu cuerpo cuando abusas de los laxantes.Afectas a la flora intestinal de tu organismo. Lo que te llevará a sufrir del estómago en un futuro cercano.
Esto evitará que el cuerpo absorba los nutrientes de los alimentos que lleves a tu cuerpo y te enfermas.
Abusar de estos productos puede llevarnos a no asimilar los nutrientes necesarios para el organismo. Y eso llevará a que te enfermes.
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7) Dejarnos “conquistar” por dietas rápidas y engañosas
No es grave. Es un error gravísimo.Aquí es cuando aparece el temido efecto rebote que hace mucho daño al cuerpo.
Además afecta al autoestima porque te sentirás mal de haber recuperado los kilos que perdiste.
A la piel le hace mucho daño porque favorece la aparición de estrías.
Cuando haces esas dietas rápidas no te alimentas bien. Ni llevas los nutrientes que necesitas para que te sientas saludable.
Olvídate de las dietas rápidas. No son buenas. Lo único que ganarás es enfermarte.
En fin, las dietas estrictas NO FUNCIONAN.
La Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (7) considera que estas dietas no tienen ningún soporte metabólico. Por lo tanto no son funcionales.
8) Tomar píldoras que disminuyen el apetito sin prescripción médica
Cuando decides tomar algún medicamento o suplemento siempre debes contar con la supervisión de un médico.Más importante aún. Contar con su autorización.
Las pastillas que evitan que te de apetito tiene muchos efectos secundarios. Además que tiene decenas de contraindicaciones.
Hay muchas personas que no la pueden tomar y no lo saben. Por lo que te puedes enfermar de forma muy grave.
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9) Saltarnos alguna comida
El organismo es inteligente.Cuando dejes de comer. Él va a acumular la mayor cantidad de grasa posible para utilizarla cuando la necesite.
No puedes dejar de comer.
Incluso debes aumentar la ingesta de los alimentos. Pero siempre de forma saludable.
No se trata de llevar grasas o carbos simples o peor aún golosinas llenas de azúcar y sin ningún nutrientes.
Debes cambiarlas por muchas proteínas. Alimentos saludables como las verduras y las frutas que deben copar tu alimentación.
Debes comer hasta 5 o 6 veces al día.
Con varias meriendas o snacks saludables y verás como nunca tendrás hambre.
10) Preparar unos platos de régimen aburridos e insípidos
El estar a dieta no quiere decir que no puedes comer delicioso.Por el contrario. Tienes la posibilidad de preparar una gran cantidad de platos. Lo mejor riquísimos.
Hay muchas plantas como el orégano, el romero, la menta o la salvia que le dan un gran sabor a la comida y no representan muchas calorías.
También el perejil, ajo, céleri y demás.
Referencias
1 http://www.alimentacion-sana.org/PortalNuevo/actualizaciones/efectorebote.htm2 https://proteinas.org.es/funciones-de-las-proteinas
3 http://www.elementos.buap.mx/num82/htm/33.htm
4 http://www.efesalud.com/dietas-de-adelgazamiento-los-errores-mas-frecuentes/
5 https://www.ocu.org/alimentacion/adelgazar/noticias/orliloss-pastillas-adelgazar
6 http://www.bmj.com/content/309/6955/655
7 http://www.fesnad.org/resources/files/Publicaciones/RevNutCom/7.pdf
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