La Navidad es una época de festejos y celebraciones, pero también un tiempo para mirarse dentro, pararse a pensar y a reflexionar. En ese marco muchos son los que, con la llegada del nuevo año, se marcan una lista de objetivos o de propósitos para exprimirlo al máximo o, simplemente, para hacer algunos cambios necesarios en su vida.
Año nuevo, vida nueva. O eso dicen. Y es casi ya una tradición, como comerse las 12 uvas en Nochevieja, hacer una lista con los nuevos propósitos que queremos cumplir el año que estamos a punto de empezar. Eso sí, si queremos que esa lista pase a ser una realidad, te compartimos una serie de consejos desde Vivienda Saludable:
- Elige el momento para confeccionar la lista: es recomendable estar solo, tranquilo, con tiempo por delante para reflexionar. Puedes probar a hacer una primera lista larga con varios objetivos: hacer más deporte, aprender a meditar, comer más sano, encontrar pareja, aprender un idioma… y, después, elegir tres o cuatro, los que pienses realmente que puedes llevar a cabo.
- Ponlos siempre por escrito, ya sea en tu móvil, en tu Ipad o en papel. Es el mejor modo de recordarlos o de volver a ellos cuando lo necesites.
- Visualiza tus objetivos: en coaching es muy habitual, visualizar, verbalizar e incorporar un gesto que exprese la intención o propósito. Crea una imagen que defina tu objetivo y escríbela o dibújala con todo detalle.
- Prepárate mentalmente: la motivación no dura para siempre. Es por eso que los propósitos de Año Nuevo tienen la fama que tienen. Has de hacerte a la idea de que estos objetivos anuales son un compromiso contigo mismo y que sólo de la constancia depende que los termines alcanzando.
- Sé realista: a la hora de elaborar tu lista de propósitos, además de la concreción, hay que huir de los propósitos que dependan de otros. Intenta fijar objetivos que sean simples, medibles, asequibles, realizables y en un tiempo determinado.
- Paso a paso. Empieza con un solo propósito. Aunque hayas elegido unos pocos propósitos, quizá pueda ser difícil llevarlos a cabo todos a la vez. Por ejemplo, si te propones ir al gimnasio varias veces en semana, salir más con tus amigos y pasar más tiempo con tu pareja, a lo mejor te das cuenta de que es imposible llegar a todo y terminas dejándolo. Lo mejor es empezar con un solo propósito, el que quieras, o con un par que sean compatibles
- Elabora un plan de acción: está muy bien hacer una lista interminable de objetivos para cumplir durante el 2024, pero si quieres llevarla realmente a cabo, debes elaborar un plan con los pasos concretos que vas a seguir para conseguirlo. Por ejemplo, si tu propósito para el año nuevo es perder algunos kilos, no vale con desearlo sin más, hay que pensar cómo y de qué manera lo vas a lograr. Puedes probar con apuntarte al gimnasio, hacer más deporte, ponerte un par de caminatas a la semana, elaborar menús más saludables con más fruta y verdura…
- Anota los progresos. Transcribir los pequeños pasos que estás dando para conseguir tu objetivo contribuyen a seguir siendo constante con el plan de acción, especialmente, cuando llegue el momento de revisar tus anotaciones y te des cuenta de todos los pasos que has ido dando para conseguir tus objetivos. Además, es recomendable que cuando consigas un hito, te premies por el esfuerzo que has hecho para conseguirlo. Permítete sentirte orgulloso por ese éxito y regálate algo. Esto nos motivará a conseguir llegar a la meta final.
Y recuerda, este tipo de listas tienen que servir de motivación para superarnos, no deben convertirse en una obligación que hacemos con pereza o de mala gana, sino en unas metas que nos motiven y nos ayuden a mejorar nuestro estilo de vida.
Fuente: este post proviene de Vivienda Saludable, donde puedes consultar el contenido original.
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