Navegar por las aguas de la terapia de pareja después de una infidelidad puede ser desafiante. Para la terapeuta familiar Marilyn Wedge, Ph. D. que cuenta con más de 30 años de experiencia en el campo de la infidelidad, la parte más difícil es mantener una actitud de lo que Carl Rogers famosamente llamó "respeto positivo incondicional" tanto para la persona infiel como para la víctima. Añade que el terapeuta se inclina de forma natural a tener más compasión por el cónyuge que ha sido herido. Sin embargo, para que la terapia tenga éxito y la infidelidad no se repita, un terapeuta debe tener empatía y respeto incondicional sobre ambos cónyuges, incluyendo al cónyuge infiel.
Terapia para superar la infidelidad y sus obstáculos
Para Wedge, los escollos rocosos que podrían destruir la terapia de pareja y superar una infidelidad son estas. Por un lado, el terapeuta a veces debe tomar la parte del cónyuge infiel a fin de que él no sienta que la terapia sea una interminable serie de palizas emocionales. Por otra parte, la persona traicionada debe escuchar las razones de su pareja infiel sin hacerle sentir que ella fue la causa de la infidelidad.
Además según la terapeuta, la razón más típica que consultan las parejas después de que uno de los cónyuges ha tenido una aventura es la preocupación por sus hijos. Especialmente cuando los niños son pequeños, el cónyuge herido puede decidir permanecer en el matrimonio si todavía ama a su pareja y siente que se arrepiente sinceramente y que no habrá ninguna infidelidad en el futuro. Si se va a ayudar a la pareja a tener un matrimonio saludable, el terapeuta tiene que creer esto también.
Asimismo recomienda que cada cónyuge tenga un terapeuta personal, que pueda tomar su lado incondicionalmente. Explica que como terapeuta de parejas, está del lado de la idea de una unión a futuro, donde ambos socios serán capaces de expresar sus necesidades en la terapia.
Terapia de pareja por infidelidad y el proceso
¿Qué ayuda a la pareja a curarse? Según Marilyn Wedge, este es el proceso regular por el cual pasan las parejas en la terapia para perdonar y superar una infidelidad.
El marco de trastorno de estrés postraumático
Ayuda a reconocer que la pareja traicionada está sufriendo de un tipo de trastorno de estrés postraumático (PTSD, por sus siglas en inglés), con escenas pasadas frecuentes y una necesidad para repetir una y otra vez los detalles de la infidelidad en la terapia. Repasando una y otra vez los eventos durante el tiempo en el que la infidelidad se llevó a cabo, le da a la víctima una sensación de control.
Esta necesidad constante de repetir los detalles de la infidelidad puede ser difícil para la persona infiel, que normalmente quiere avanzar en el matrimonio y dejar atrás el pasado. La persona infiel no puede entender la necesidad de su pareja de regresar continuamente sobre el mismo tema en terapia, especialmente cuando los detalles le causan tanta angustia.
Enmarcando las sensaciones dolorosas de la pareja herida como una forma de trastorno de estrés postraumático, ayuda la persona infiel a tener más paciencia con el proceso. Él o ella debe responder a todas las preguntas de su cónyuge con el mayor detalle que se requiera y con la frecuencia que su pareja necesita. Debe ser completamente honesto acerca de incluso el más mínimo detalle.
La narrativa del "yo débil" y el "yo superior"
Según esta narrativa, la pareja infiel está luchando por convertirse en una mejor persona (el yo superior) que la parte de sí mismo (el yo más débil) que tuvo la aventura. En el caso de un hombre infiel, con su yo superior ama a su esposa y a sus hijos y quiere ser un buen esposo y padre. Con su yo más débil, él intentó superar sus sentimientos de impotencia en el matrimonio estando con una mujer que le deseó, y quien le dio un sentido de poder y control.
A menudo, una persona es infiel porque cree que su pareja no escucha sus sentimientos, no respeta sus decisiones y ha acaparado todo el poder en el matrimonio. Teniendo una aventura, inclina el equilibrio de poder en la relación a su favor. La Infidelidad es el juego de poder por excelencia. En terapia, la pareja infiel aprende a expresar sus sentimientos directamente, en vez de desempeñar sus sentimientos de impotencia teniendo un encuentro sexual.
Decir "lo siento" todos los días
En las primeras etapas de la terapia, el cónyuge herido puede necesitar escuchar de su pareja infiel disculparse todos los días por la infidelidad. La victima también puede necesitar que él o la infiel avisen por escrito o llamen más a menudo durante la semana a fin de que la persona traicionada sienta que su cónyuge está pensando en él o ella a menudo. Esto es especialmente necesario cuando la pareja herida ha descubierto frecuentes textos o llamadas entre su pareja y la persona con la que tuvo una aventura.
El ritual de enterrar el pasado
En un punto medio en la terapia, Wedge, sugiere un ritual de poner simbólicamente la infidelidad detrás de la pareja. Incluso puede sugerir a la pareja enterrar todos los recordatorios de la época de la infidelidad. El entierro debe estar cerca del lugar donde se casaron. Este tipo de ritual ayuda a traer de vuelta buenos recuerdos de la época en que la pareja se estaba cortejando y estaban más enamorados.
La necesidad de sentirse sexualmente deseable
Por ejemplo si la víctima es una mujer, a menudo, necesita estar segura de que es sexualmente deseable como "la otra mujer". Es importante tener una discusión abierta en las sesiones de terapia sobre lo que cada socio necesita para inspirar pasión.
El final de la terapia
Si la terapia de pareja ha sido exitosa, el diálogo entre la pareja cambiará de una constante repetición de los detalles de la infidelidad a tener discusiones más del día a día del tipo: problemas maritales, las finanzas, la intimidad, cómo pasan su tiempo y así sucesivamente. En este punto, la victima herida ha recuperado cierto grado de confianza y la persona infiel ha aprendido a expresar sus sentimientos y necesidades en la terapia.
Aunque la terapia para superar una infidelidad puede ser doloroso y difícil -para el terapeuta, así como para los cónyuges- a menudo puede ser exitoso. Un estudio realizado por Shirley Glass en 2000 encontró que el 71% de las parejas que habían asistido a terapia después de una infidelidad permanecieron juntos.