La prevalencia mundial de la EPOC oscila entre el 5 y el 10%. Ha aumentado en las últimas décadas y es más frecuente en hombres que en mujeres dada la mayor prevalencia de tabaquismo en los hombres, aunque esto se espera que cambie en las próximas décadas. En España se han realizado varios estudios epidemiológicos con base poblacional, obteniendo una prevalencia global de 9,1% (el 14,3% en hombres y el 3,9 %en mujeres).
Según un estudio piloto realizado en 2010 y publicado en la revista Respiratory Care, la práctica del Taichi puede ser beneficiosa en pacientes con EPOC con intensidad de moderada a grave.
Para esta investigación, se llamó aleatoriamente a 10 pacientes con EPOC, divdiéndolos en dos grupos: el primero recibió dos clases semanales de Taichi de una hora de duración durante 12 semanas, haciendo hincapié en el movimiento suave y relajado, la meditación y las técnicas de respiración; el segundo siguió el tratamiento habitual. También se llevaron a cabo entrevistas cualitativas a estos pacientes con respecto a su experiencia realizando Taichi. A las 12 semanas se observó en los pacientes que habían practicado Taichi una mejoría significativa en la puntuación del cuestionario respiratorio con respecto al grupo que no realizó Taichi.
El estudio completo puede verse aquí.
Asimismo, según una investigación del Hospital General Concord Repatriation junto con la Universidad de Sydney (Australia), practicar Taichi puede mejorar la capacidad y la calidad respiratoria en personas con EPOC. El estudio ha sido publicado en European Respiratory Journal.
Los investigadores dividieron para sus investigaciones a un grupo de 42 personas con EPOC: medio grupo recibió clases de Taichi dos veces por semana, así como práctica en su casa; la otra mitad del grupo realizó un seguimiento médico que no incluía ejercicio. Antes de esto, los investigadores probaron la capacidad de ejercicio de todos los participantes a través de un test de caminar y se les realizó el Chronic Respiratory Disease Questionnaire, que da una indicación de cómo la enfermedad afecta a su calidad de vida.
Comparado con el grupo que había completado el tratamiento médico sin ejercicio, los participantes que practicaron Taichi caminaban mucho más que aquellos que no habían realizado ejercicio, además de mejorar su calidad de vida en general según el cuestionario, que se les realizó de nuevo posteriormente.
La autora del estudio asegura que «en un tiempo en el que sólo aumentan las personas diagnosticadas con EPOC, es importante proporcionar otras opciones para practicar ejercicio a la medida de cada paciente. El Taichi puede ser una alternativa a los programas habituales de ejercicio para la rehabilitación pulmonar».
Los resultados proporcionan evidencia convincente de que el Taichi es un programa de capacitación eficaz para los pacientes con EPOC, y se podría llegar a considerar como una alternativa a los programas de formación habituales de ejercicio que están disponibles en la rehabilitación pulmonar.
La investigación está disponible en el European Respiratory Journal.
Manu Rodríguez
www.taijivalencia.com