La transpiración anormal de cuerpo durante la noche, es indicio de alguna afección que habrá que tratar. El cuerpo elimina por este medio, todas las sustancias nocivas acumuladas.
¿Cuáles son las causas?
Las posibles causas de la sudoración nocturna son, entre otras, las siguientes:
Enfermedades infecciosas (por ejemplo, gripe, tuberculosis, SIDA o malaria)
Enfermedades autoinmunes (por ejemplo, artritis reumatoide)
Factores externos (por ejemplo, temperatura ambiente elevada o llevar mucha ropa de abrigo)
Alimentación (por ejemplo, por especias picantes o comidas abundantes antes de ir a dormir)
Enfermedades neurológicas (por ejemplo, esclerosis múltiple, epilepsia, ictus cerebral)
Trastornos hormonales (por ejemplo, hipertiroidismo o molestias propias de la menopausia)
Enfermedades metabólicas (por ejemplo, diabetes mellitus)
Tumores (por ejemplo, leucemia, linfomas, como el linfoma de Hodgkin o el linfoma de no Hodgkin)
Causas psíquicas (por ejemplo, trastornos de pánico, trastornos del sueño o pesadillas)
Apnea del sueño
Medicamentos, alcohol y drogas, así como su desintoxicaciónLa sudoración nocturna también pueden aparecer sin una causa física o identificable. En estos casos se habla de sudores nocturnos idiopáticos.
¿Como solucionarlo?
Ante todo deberás concurrir a un médico para un chequeo y con eso poder determinar la causa.
En algunos casos, resulta muy efectivo una tisana de cáscara de piña y manzana antes de acostarse.
Para evitarlos se debe llevar una dieta sana, rica en frutas y ensaladas crudas, evitar el alcohol y las bebidas estimulantes.
Las plantas medicinales apropiadas para controlar este trastorno son: Ambrosía, Encina, Salvia o Valeriana.