Ayer oí a un médico decir que en la hipotética situación de que encerráramos a una persona en una habitación sin que el sol le tocara la piel en toda la vida, ésta empezaría a mostrar los signos del envejecimiento a los 70 años.
Afortunadamente existe el término medio entre sufrir un carcinoma y morir más blanca que la teta de una novicia, como suele decirse. Y sabiendo encontrar ese punto puedes disfrutar de todo lo bueno del sol sin ponerte en peligro.
Recuerdo los años en que bote de Nivea en mano nos untábamos como locas y nos tirábamos a la arena durante horas, las más sofisticadas incluso mezclaban unas gotitas de mercromina (la precursora del Betatine de ahora) para coger más tono.
¡La de barbaridades que habremos hecho! Esos botes de crema de zanahoria y crema de te sin protección ninguna que nos poníamos en nuestra juventud!!! ¡Diosa mía, qué locas hemos sido!
Si llego a saber entonces que la piel tiene más memoria que un elefante…
Como no podemos dar marcha atrás pero sí aprender de los errores ahí van unas cuantas recomendaciones:
El 50 es un buen número para empezar. Te pones morena igual pero sin pasar por el tono gamba.
La crema hay que darla al menos media hora antes de exponerse al sol. Exponerse no es tumbarse cual lagarto sobre la arena, salir a la calle ya es exponerse así que no bajes la guardia.
Renueva tu capa de crema al menos cada dos horas y también siempre después de bañarte. Por muy water-resistant que sea una crema más vale prevenir…
No te olvides del cabello, el pelo también se quema con el sol. Gorrita o sombrero de paja y protectores en spray es la mejor opción. Los hay a patadas de todas las marcas, precios y colores. No te prives de ellos.
No te des un atracón de sol porque quieras ponerte morena más rápido. 15 minutos al día para empezar es más que suficiente.
Cómprate una buena sombrilla. Nada de total para un ratito no me hace falta cargar con este trasto.
Si no te quieres arriesgar echa mano de las cremas autobronceadoras que han evolucionado mucho y ya no tienen ese efecto zanahoria tan temido.
Además, para las más tecnológicas, también hay gadgets varios para ayudarte a coger colorcito:
Los bikinis que miden la radiación ultravioleta y te mandan un mensaje al móvil para que te pongas más crema solar. Aún son caros pero todo se andará.
Y las pulseras inteligentes que recomiendan el tipo de protección según tu piel y te informan de la radiación de los UV y de la cantidad de sol acumulada durante el día. Puedes bañarte con ellas y son ideales para que las lleven los niños.
Y ya que estamos untadas hasta las cejas, con el sombrero más bonito del mundo, bajo una estupenda sombrilla y rezando para que no pase un niño corriendo y nos ponga perdidas de arena no te olvides de la botellita de agua!! Bebe agua, agua y agua. Hidrátate en todo momento. Tu piel lo necesita.
Piénsalo, hoy morena mañana más vieja. No te la juegues, esto es muy serio.
¿Te suenan algunas de las locuras de nuestra juventud? ¿Qué otras has hecho tú bajo el sol? Déjanos un comentario aquí debajo a ver si nos ponemos en modo remember y nos echamos unas risas.
Gracias como siempre por leernos y… tira por la sombra que los bombones al sol…
El post Sol: no te dejes la piel. es original de Comienzo Hoy.