Proponérselo debe ser sinónimo de lograrlo, en una entrevista que le realizaron hace algunos años a Shakira (con solo trece años de edad) en un canal de televisión, le preguntaron que como se veía en los próximos años, contestó: llevando mi música a nivel Nacional y por qué no a todos los rincones del mundo y lo logró. Así mismo En un comercial el cantante Daddy Yankee, dice: si te lo propones todas las puertas se abren, es cierto.
Proponérselo de veras, de verdad-verdad, con todos los sentidos puestos en el objetivo y para proponérselo de esta manera la primera regla de oro es creértelo, sin que las objeciones sean mayores.
Nada te llega solo, como caído del cielo, te tienes que esforzar, Dios dice ayúdate que yo te ayudaré, es cierto, con el pensamiento, el sentimiento y la acción logramos atraer y alcanzar todo lo que nos propongamos, -esto lo aprendí de un libro que leí llamado el SECRETO-.La ley física de la atracción, todo lo que pienses, sientas y acciones se te cumplirá, en sincronización con la energía del universo. Este tema también lo tratan en el libro del ÉXITO CUANTICO, el cual recomiendo ampliamente.
Retomando lo de proponérselo, después de analizar bien la situación, se que la palanca impulsora de lograrlo se resume en una palabra DETERMINACION, cuando has tomado la determinación de lograr algo, debes terminarlo. Para que algo se realice debe existir inicialmente en un mapa mental, imaginarnos que está hecho y darlo como hecho. Describe el prestigioso psicólogo español, Rafael Santandreu, en sus libros, que su abuelo Rafael, tenía dos principios o pilares en los que basaba su éxito, terminar todo lo que empieza y hacer, lo que dices que vas a hacer.
La DETERMINACION, es una palabra que parece que no dijera mucho, al contrario hace mucho, parece que por sí sola tiene una gran fuerza. Determinados a terminar nuestro proyecto, determinados a llevar a cabo nuestra idea original, determinados a ser buenas personas, buenos esposos, buenos amantes, buenos profesionales, buenos hijos, determinados aetc., con una determinación imparable, a prueba de desánimos, cumplir, llueva truene o relampagueé, como decía mi padre. Sin utilizar la procrastinacion, es decir la postergación o dilación.