Salud y consejos: dolor de muelas

¡Buenos días de este maravilloso (y caluroso, aquí) Sábado! Hace mucho tiempo que no actualizo el blog debido a que he estado algo enferma. Ahora que estoy mejor aprovecho un hueco que tengo para darle a la escritura y redactar esta entrada con unos consejos que me vinieron bastante bien estos días indispuesta. He estado algo resfriada y, de paso y a mayores, me vino la regla bastante fuerte y con dolor abdominal insoportable (como a veces nos viene a las mujeres). Aparte de eso hay que sumarle un terrible dolor de muelas. En ese momento no tenía Ibuprofeno a mano ya que, como sabéis (y si no os lo digo yo), es lo que se recomienda ante el dolor muelas o inflamación en la boca por éstas, junto con el Paracetamol (solo que éste está más enfocado a ser un analgésico antipirético que un analgésico antiinflamatorio)

El dolor de muelas es uno de los más intensos, incómodos y dolorosos que existe en el cuerpo

Hay que tener en cuenta que, aún teniendo estos medicamentos a mano, no se deben abusar de ellos. El Ibuprofeno es el analgésico y antiinflamatorio no esteroideo (AINE) más comúnmente usado. La dosis recomendada diaria suele ser de 1200 mg (dos pastillas de 600 mg o 3 pastillas de 400 mg tomadas en un intervalo de 6 a 8 horas dependiendo de la intensidad del dolor) y no se debe exceder de los 800 mg (este tipo de dosis se da por receta médica y bajo supervisión de un doctor) por dosis o 3200 mg por día, ya que puede causarnos una intoxicación grave peligrosa para nuestra salud. Las sustancias que componen el Ibuprofeno son muy difíciles de procesar y eliminar para nuestro organismo, por ello no se recomienda un abuso excesivo de éste por tiempo prolongado puesto que puede dañar severamente nuestros riñones, nuestro hígado y nuestro sistema nervioso y cardiovascular.Debido a los riesgos que podemos llegar a tener con un abuso de estos medicamentos, hoy os voy a dejar diez consejos o "tips" caseros para sustituir la opción "química" por una natural que nos ayude a disminuir tan terrible dolor y sus consecuencias, ¡toma nota que empezamos!:

~ Masticar perejil: Masticar unas hojas de perejil con la muela adolorida alivia bastante el dolor que nos causa. Esto es debido a las sustancias de las que está compuesta esta hierva que ayudan a adormecer la muela y a calmar las posibles infecciones, además de refrescar el aliento.

~ Agua y una cucharada de sal: La sal es nuestra gran aliada debido a su poder antiséptico. En un vaso de agua añadimos una cucharada de éste componente y hacemos enjuagues con ello después de cada comida. Ayudará a calmar el dolor y a controlar cualquiera posible infección que tengamos.

~ Clavos de olor: Esta especia es otro de los ingredientes que nos ayudará a disminuir el dolor de muelas. Contienen una sustancia llamada eugenol que es un potente sedante. Introduciremos un par de clavos en la boca y los morderemos suavemente con la muela dolida. Al morderlos nos adormecerá la zona y, así, nos calmará el dolor. También podemos añadir unos cuantos clavos a nuestro enjuague bucal común y usarlo un par de veces al día para anestesiar la zona.

~ Hilo dental: A veces el dolor de muelas no solo se debe a una infección o a una caries, si no que simplemente puede ser causado por una partícula de comida que se pudo haber quedado entre la encía y el diente. Para ello es importante usar hilo dental una vez que nos cepillamos los dientes y así evitar esta molestia. Si nos duele una muela y observamos que no está dañada usaremos el hilo dental. Lo más probable es que haya quedado algún resto de alimento encajado en la encía.

~ Ajo, poderoso antiséptico y antibiótico: Se que diréis "pero masticar ajo es asqueroso" o "pero te deja un mal aliento increíble" La realidad es que el ajo es un poderosísimo antiséptico y antibiótico. Ayudará no sólo a calmar el dolor, si no a bajar la inflamación y a controlar la infección en el caso de haberla. Masticando un diente de ajo nos ayudará a todo ello y, para los que no lo soportan masticado, podemos hacer una infusión de éste con varios dientes picados en un poco de agua hirviendo.

~ Té negro: Debido a su contenido en ácido tánico (potente analgésico y desinflamatorio) el té negro nos ayudará mucho a controlar la inflamación y las molestias de la muela. Después de hacernos un delicioso té negro usaremos la bolsita que contiene las hojas de té para aplicarla directamente en la zona dolorida. No la usemos caliente, ya que eso podría aumentar las molestias. Vamos a esperar a que se enfríe a temperatura ambiente y, una vez enfriada, aplicaremos durante unos minutos en la zona. Si hacemos ello durante varias veces al día nos reducirá el dolor y nos bajará la posible inflamación.

~ Frío con compresas heladas: El frío nos ayuda a parar el riego sanguíneo de la zona con molestias, lo cual nos aliviará el dolor y la inflamación. Es por ello que se recomienda aplicar externamente compresas frías para evitar molestias en la boca. Se recomienda cubrir la compresa con un paño para que el contacto no sea tan directo y no sintamos más dolor al tener un cambio brusco de temperatura.

~ Agua oxigenada: Al ser un producto específico para desinfectar nos puede ayudar a reducir el dolor e inflamación aplicándolo directamente con un algodón en la muela dolorida, pero hay que tener cuidado ya que no se puede ingerir (en cantidad excesiva), lo que lo hace algo peligroso.

~ Enjuagues con licores-alcohol: Las bebidas alcohólicas juegan un papel importante cuando sufrimos molestias en la boca causada por el dolor de muelas de juicio o infecciones por caries. El alcohol que contienen ésta penetra en la encía y nos adormece el nervio del diente, lo que hace que el dolor disminuya. Tener en cuenta que no es necesario ingerir el producto, debemos hacer enjuagues con un solo sorbo que luego desecharemos.

~ Enjuague bucal casero: También os daré una receta de un enjuague bucal casero (de los de antaño, que hacían nuestros abuelos y abuelas) para aliviar las molestias bucales provocadas por las muelas. Muchos de los ingredientes ya están mencionados, pero ahora los juntaremos para hacer un enjuague potente contra el dolor e inflamación. Hacemos una infusión con cinco clavos de olor, un pellizco de sal (una cuchada sopera), azafrán y lo hervimos todo en un cazo de agua. Una vez templada usaremos esta infusión como enjuague unas 4-6 veces diarias (dependiendo de la intensidad del dolor)

Hay que tener en cuenta que estos remedios son sustitutivos para no realizar un abuso excesivo de medicamentos químicos como el Ibuprofeno o Paracetamol y, así, no dañar o cargar tanto nuestro organismo. En ningún momento ello va a ser solución para frenar cualquiera posible problema bucodental, sólo para aliviar los síntomas. Así, como siempre os suelo decir, si tenéis cualquier problema es imprescindible visitar a vuestro especialista, en este caso el dentista.

Espero que estos pequeños consejos os sirvan de ayuda y, como siempre, nos leemos en el próximo "post" (que haré lo posible por no tardar mucho en escribirlo). Comentar también que estoy barajando la posibilidad de crear un nuevo proyecto con otro blog que irá ligado a este, pero más específico en temática y menos personal, así que por ello quizás tarde un poco más en actualizar. ¡que tengáis un buen fin de semana!

"Más sabe el diablo por viejo que por diablo"