La rinitis se produce cuando nos exponemos a productos que nos dan alergia y nuestro cuerpo reacciona de forma exagerada a sustancias aparentemente inofensivas tiene componente genético pero factores como los antecedentes familiares o ambientales también intervienen en su aparición.
Los síntomas pueden confundirse con un resfriado común, pero a diferencia de éste no produce fiebre ni malestar general.
Las causas más comunes son: el polen, los ácaros, el pelo de animales o las plumas, detergentes, o perfumes.
El diagnóstico ha de hacerlo un alergólogo través de distintas pruebas y observación.
La prevención es importante una vez está diagnosticada, según el tipo de rinitis que se padezca:
Si es estacional hay que evitar el campo o los parques durante la época cuyo polen le afecte.
Si es perenne hay que controlar las sustancias domésticas, el polvo que se acumula en alfombras, mantas, edredones, cortinas, la humedad, no es aconsejable el uso de humidificadores.
Los tratamientos de la medicina convencional son: antihistamínicos, corticoides o vacunas.
El tratamiento natural para reducir los síntomas:
Alimentación, seguir una dieta baja en grasa y rica en carbohidratos complejos, no deben faltar la verdura de hoja verde, color amarillo y naranja, brotes de bambú, col, remolacha, zanahorias, patatas, cebollas, ajo, rábano, jengibre o pimienta de Cayena.
Eliminar de la dieta: lácteos, carne roja, plátanos y cítricos, chocolate, azúcar, trigo, cacahuetes, alcohol y cafeína.
Complementar con suplementos, vitaminas y minerales: bioflavonoides, son antihistaminicos naturales, cuya acción se aumente con bromelia y vitamina C.
Tomar una cucharada de aceite de linaza al dia.
Yogurt bifidus o kéfir por la mañana y por la noche.
Vitaminas A, C, E y zinc.
Tritura un diente del ajo y mezcla con el aceite de onagra. Tómalo por la mañana junto con el desayuno, ambos tienen propiedades para mejorar las defensas y reducir los síntomas propios de las alergias respiratorias, especialmente la rinitis.
Tratamiento con fitoterapia:
Milenrama: reduce la congestión y la mucosidad.
Eufrasia: especialmente recomendada para las molestias oculares, aunque también reduce los picores, estornudos y la mucosidad.
Gingko biloba: tiene bioflavonoides y se utiliza como antiinflamatorio y antioxidante.
Ortiga: se usa como antihistamínico y antiinflamatorio.
Las soluciones salinas ayudan con la congestión.Además existen terapias que os pueden ayudar también con los síntomas como la auriculoterapia o la reflexología podal, shiatsu, etc. que mejoran el funcionamiento general de nuestro organismo.
Espero haberos facilitado información útil para que esta próxima primavera lo llevéis mejor.