El higo es una fruta apreciada por su sabor característico y por su alto contenido en nutrientes, entre los que destaca su alto contenido en fibra, necesaria para mantener un perfecto equilibrio dentro del organismo y lograr así que los residuos que se acumulan en su interior desaparezcan, manteniendo una perfecta salud corporal. Junto a esto las vitaminas y los minerales ocupan una parte importante de los beneficios que nos brinda, así como los antioxidantes. A pesar de todo es necesario que recalquemos el papel medicinal que tienen los higos.
Una de las cualidades que más les caracteriza es su poder expectorante, ya que contiene propiedades que nos ayudan a limpiar los pulmones. Por este motivo las hojas de la higuera y sus frutos son muy recomendables cuando padecemos afecciones respiratorias como bronquitis, catarros, mucosidad excesiva… Aplicar este fruto nos ayudará a eliminar este exceso de mucosidad y encontrarnos mucho más aliviados.
Su poder laxante también es destacable, por ello es muy recomendable la ingesta de higos cuando se tienen problemas de estreñimiento o estomacales. Es un buen aliado para recuperar el tránsito intestinal y evitar problemas derivados de su mal funcionamiento. Junto a esto se le achacanpropiedades antirreumáticas, por ello es recomendable la ingesta de higos en personas que tienen antecedentes familiares con esta enfermedad, así como aquellas que practican mucho deporte y someten a sus articulaciones a un desgaste elevado.
Todo el mundo puede comer higos, de hecho es recomendable que los incluyamos en nuestra dieta, ya que se trata de un alimento fácilmente digerible, que además de asimilarse con mucha rapidez hace que nuestro estómago esté protegido, evitando así la aparición de desajustes gástricos y estomacales como la acidez, el reflujo… Comer este alimento nos ayudará a mejorar las digestiones y con ello el estado general del organismo.