Clasificación del higo según su variedad
Principalmente se clasifican, por el color de la cáscara en:
Higos Blancos, con tonalidades blancas, amarillas y verdes. Destaca en esta categoría la variedad Cuello de Dama, procedente del Valle del Tiétar, con tonalidades blancas, amarillas y verdes.
Higos negros o rojo oscuro, en esta categoría destacan los de la variedad Cuello de Dama negra, cultivados en Lérida y Huesca.
Características del higo
Hay que hacer una distinción entre lo que son brevas y lo que son higos, ambos son los frutos de la higuera, pero las brevas son la primera cosecha, son higos que no han madurado en otoño y se conservan en estado latente hasta la primavera siguiente.
Tienen una piel fina de color verde o violeta y aunque son dulces no lo son tanto como los higos. Los higos llegan en otoño y su temporada es breve, septiembre y octubre.
Son una fruta blanda, muy dulce, carnosa y melosa. Son muy delicados y en la nevera tan solo nos aguantarán como máximo tres días. Al comprarlos hay que elegir los ejemplares maduros pero a diferencia de cuando elegimos otras frutas, en este caso hay que seleccionar los que tienen la piel arrugada y con alguna abertura.
Esto indica que están en su punto, la textura ha de ser suave y ceder a la mínima presión de los dedos al tocarlos.
Por esto es también muy común el consumo del higo seco, desecado al sol, que gracias a su alto contenido en azúcares se mantiene en perfecto estado mucho tiempo.
Usos del higo en la cultura moderna
Los higos frescos en la cocina, aparte de ser consumidos como fruta, se utilizan en muchas preparaciones de repostería, mermeladas, conservas y helados. Con el higo seco se elabora el famoso “pan de higo”, higo desecado y prensado con almendras. Y el delicioso aroma y sabor de los higos también acompaña muy bien a algunos platos salados de carne asada y caza.
Los higos son muy digestivos, favorecen el tránsito intestinal y son ricos en vitaminas C, A y del grupo B; en minerales tales como potasio, magnesio y calcio; en hidratos de carbono (fructosa, glucosa y sacarosa) y fibra. El higo seco contiene más cantidad de calcio y de azúcares, por lo tanto, es más calórico.
Finalmente es importante recalcar que el higo es una fruta muy sabrosa y altamente nutritiva, puedes combinarla de distintas maneras como por ejemplo en jugos y dulces, no dejes de experimentar y disfrutar de las variadas recetas con higo que puedes encontrar por internet, estoy seguro que te encantaran.