Aún recuerdo el primer día en que una paciente cogió inesperadamente mi mano. Yo me acerqué porque estaba en shock, pero al sentarme cerca, mi mano derecha se encontró dentro de las suyas.
No quise sacarla porque el primer efecto fue la calma en ella, Pero apenas pasado un minuto un calor afectuoso recorría desde mi mano derecha hasta mi corazón. Era como el confort de estar en casa, un sentimiento realmente muy antiguo y benéfico. Lógicamente al acabar ese momento pregunté qué había hecho con mis manos: "Reiki"
Eso me llevó a aprenderlo.
Todavía era el Reiki de blanco de Takata, la introductora de esta técnica y forma de vivir en EEUU. Encontré dos profesores que me ayudaron a vencer mis resistencias, ya que mi procedencia era solo académica, y nada vivencial. La Energía de Rei se encargó de demostrarme que aquello funcionaba.
¿Por qué aprender Reiki? ¿Por qué me acerqué? La impresión tan amorosa que recibí en mis manos me llevó a este aprendizaje que se ha alargado por 20 años. Al final me he dedicado a formar Shi-hans en todo el mundo, a aplicar Reiki en mi consulta y en 2010 fui congresista en el Congreso Nacional de Reiki en Barcelona. Hasta ahí ha llegado mi afán por facilitar el acceso a Reiki.
Como explico, el motivo principal que debería empujar a cualquiera a aprender Reiki es poder descubrir el Amor. Tal cual: EL Amor y el efecto de su aplicación.
Más allá de la técnica en si, de los procedimientos, o incluso que el lector decida hacerlo por otra vía, aprender a canalizar la Energía del Amor es un privilegio.
Poder descubrir de qué forma puedo conectarme a la Fuente, cómo debo proceder para convertirme en un canal o instrumento para dejar que pase por toda mi persona la Energía o poder emplear los Shirushi como potenciadores del proceso, es de por sí, más que motivo suficiente.
Pero detallemos más:
Con Reiki puedes dulcificar procesos dolorosos. Hemos experimentado que menguan todos los síntomas. Por ejemplo de la quimioterapia.
Contribuirás a que aumente la comprensión sobre los significados de los acontecimientos de la vida. En muchas ocasiones, pensamos que todo es porque sí. Pues con la sucesiva aplicación de Reiki y sobre todo usando las sintonizaciones, uno empieza a comprender el porqué final de lo que ocurre.
Aplicándolo menguarán los dolores físicos.
Y verás cómo la Energía acompaña a las personas en sus cambios. Como si poco a poco la Energía empujara en lo principal: El cambio en las tendencias personales, beneficiando las que son constructivas y dismnuyendo el peso de las destructivas.
Cómo aumenta la intuición de los que lo reciban. De modo que la Comprensión anticipada se presenta como algo natural.
Cómo las emociones se apaciguan y toman entidad: La aplicación de Energía mantiene a raya el estrés, las emociones destructivas, pero sobre todo el practicante toma conciencia de lo que está ocurriendo con sus emociones.
Cómo aumenta la resiliencia. En general la capacidad de resolver situaciones y saberse adaptar.
Reiki puede convertirse además en un modo de vida, que promueva a conexión con la Energía que todo lo origina, el Amor por la Creación, la necesidad de Crear y ser una Contribución en la vida.
Algunos logran empoderarse de la Conexión y otros “Ser Uno” con el Símbolo Maestro de Reiki, el DKM. Y finalmente caminar hacia el Satori.
En realidad, son muchos los porqués en este aprendizaje, y sin duda recomiendo la experiencia Reiki.
Nota: El artículo ha sido publicado originalmente en Saludterapia.
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