Las bacterias, residuos de comida e incluso la saliva de la persona con algún elemento infeccioso puede estar causando graves problemas en la salud de las encías, por lo que tenemos como consecuencias inflamación, dolor e incluso muchas veces sangrado de encías, por lo que es muy recomendado tratar con rapidez este problema antes que se agrave.
El enjuague bucal ayudará a aliviar el dolor de encías inflamadas, puesto que el mismo acostumbra a incorporar sustancias que permitirán eliminar rápidamente todas las bacterias contenidas en la boca. Se recomienda enjuagar al menos una vez al día la boca durante un minuto aproximadamente, para lograr que el líquido logre diluirse entre todos los dientes, encías e incluso también debajo de la lengua.
Determinados alimentos y bebidas con un alto nivel de azúcar, como es el caso de las gaseosas, no ayudan a aliviar el dolor de encías, sino que al contrario lo estimulan, es por ello que recomendamos evitar a toda costa este tipo de alimentos cuando tengan este tipo de problemas relacionados con la salud dental.
Se recomienda a las personas que padecen dolores de encías el ingerir en mayor medida aquellos alimentos que incluyan vitamina C, tal como es el kiwi, el brócoli, determinadas fresas y frutos como la papaya. De esa manera las encías lograrán sanar más rápido, logrando eliminar todas las bacterias contenidas en la boca.
Uno de los remedios caseros para detener rápidamente el sangrado y a su vez aliviar el dolor de encías es realizar un enjuague casero con la ayuda de agua tibia y dos cucharadas de sal, logrando de esa manera quemar rápidamente a las bacterias y cicatrizar cualquier herida. Si bien puede doler un poco este remedio natural, es uno de los más recomendados a quienes padecen dolor de encías, puesto que actúa de manera directa, es muy económico y se lo puede implementar en cualquier momento.
La mejor forma de evitar el dolor de encías es prevenir este tipo de problemas, por lo que si una persona es propensa a contraer enfermedades bucales como la gingivitis, se recomienda tomar todos los recaudos posibles. La recomendación habitual es cepillar al menos 3 veces por día los dientes y utilizar enjuague bucal al menos una vez por día. También se puede complementar la limpieza con el uso de hilo dental, como así también lograr programar cada cepillado luego de cada comida para evitar que restos de comida queden almacenados mucho tiempo en la boca y de esa manera lograr eliminar todas las posibles bacterias de nuestro organismo.