La mayoría de los casos de escoliosis son leves y no requieren de mucha complejidad a la hora de tratarlas, pero algunas deformidades de la columna vertebral continúan empeorando a medida que los niños crecen. La escoliosis grave puede ser hasta incapacitante. Una curvatura muy grave de la columna reduce el espacio dentro del pecho, lo cual dificulta el funcionamiento correcto de los pulmones y da como resultado la fatiga, el asma y la dificultad para caminar.
Los signos de la escoliosis pueden ser:
• Hombros a distinta altura
• Curvatura de la columna
• Prominencia de un omóplato respecto al otro
• Cinturas a distinta altura
Es muy importante diagnosticar la escoliosis rápidamente y comenzar un tratamiento de fisioterapia lo antes posible para disminuir su avance e incluso se puede llegar a corregir, de forma parcial o total, evitando así el tratamiento quirúrgico.
A la hora de tratar la escoliosis, se tendrá en cuenta la gravedad de la curva, la edad del paciente y otros factores, como el estado físico. Si es necesario corregir la curva, la primera opción es, generalmente, un tratamiento no quirúrgico, como el uso de un corsé.
En el tratamiento de fisioterapia se utilizan varios métodos para el mejoramiento, pueden ser estiramientos, usos de herramientas especializadas o actividad física, entre ellos están:
1) Reeducación Postural Global (RPG): es un tratamiento muy efectivo para la escoliosis. Consiste en realizar algunas posturas de estiramiento de todo el cuerpo. El tratamiento es suave, progresivo y activo. Y con el tiempo logra reducir la escoliosis significativamente.
2) Inducción miofascial: Es una combinación de presiones sostenidas, posicionamientos específicos y estiramientos muy suaves. Con este tratamiento se eliminan restricciones de la fascia muscular y así se equilibra la función corporal alterada. Debe ser realizada por profesionales que sean expertos en la fisioterapia.
3) Fisioterapia respiratoria: En algunos casos es necesario realizar este tipo de tratamiento para buscar la expansión del lado cóncavo e introducir la conciencia postural con el mayor enderezamiento activo posible, para evitar en la vida cotidiana las posturas que agraven la escoliosis.
4) Fisioterapia clásica: Estiramientos y ejercicios con el objetivo de flexibilizar y fortalecer la columna vertebral, ejercicios de movilización para mantener, recuperar y mejorar la capacidad de movimiento articular, sobre todo en columna vertebral, tronco y cintura escapular.