LOS ALIMENTOS PROCESADOS Y LA COMIDA BASURA
Cada día es más frecuente encontrar en nuestros hogares alimentos procesados, que son todos aquellos productos alimentarios que han sido sometidos a lavado, triturado, corte, pasteurización, blanqueado, cocción, enlatado, congelado, desecado, deshidratado, mezclado, procesado u otro procedimiento que modifica el estado natural del alimento.
Las técnicas de conservación de alimentos se emplean desde tiempos antiguos con el objetivo de prolongar la vida de los productos alimentarios evitando su deterioro. Además nos aporta la ventaja de ahorrar tiempo y energía en su preparación.
Estos alimentos procesados que se venden en los supermercados presentan muchas veces altos niveles de sal, azúcar y grasas saturadas, que se comprueban leyendo sus etiquetas y observando que sus niveles de sal, azúcar refinado y grasas saturados son superiores al 20º 25% de la cifra total de hidratos de carbono, grasas, etc. Hasta incluso muchos de ellos contienen aditivos que pueden ser precancerosos y hasta falta de otros nutrientes necesarios para nuestra salud como fibra, vitaminas y sales minerales.
En los supermercados venden alimentos procesados precocinados con altos porcentajes de sal oculta, grasas saturadas ocultas y azúcar oculto que perjudican a nuestra salud hasta incluso comida basura “perritos, pizzas elaboradas, bolsas de patatas fritas , dulces, ect que dañan a nuestra salud.
Pero no todo son desventajas, también venden alimentos procesados con una composición nutritiva saludable como panes integrales, galletas integrales, carnes, pescados, huevos, legumbres, arroz y pastas integrales, frutas y verduras, hasta incluso productos lácteos como leche, yogures, leches vegetales, queso fresco, etc.
CONGELACIÓN DE ALIMENTOS
La congelación, que es uno de los métodos nutritivos más frecuentes, nos protege el color, sabor, humedad, contenido y valor nutritivo de los alimentos. Las verduras congeladas son de calidad excelente y se procesan y envasan poco tiempo después de su cosecha.
En los alimentos congelados el agua se transforma en hielo gracias a sus temperaturas muy bajas, lo que paraliza el proceso natural de degradación y su crecimiento bacteriano. Un alimento congelado presenta las mismas características naturales y nutricionales que el alimento fresco, y por lo general no llevan aditivos añadidos. La congelación industrial se realiza de forma más eficaz y segura que la congelación casera.
La temperatura ideal para congelar alimentos es -18ºC, en el cual las bacterias de los alimentos no se reproducen y es necesario mantener esta temperatura desde que salen de la fábrica hasta que llegan a la tienda donde son vendidos.
Cuando compramos alimentos congelados debemos tener en cuenta:
• La temperatura del alimento congelado no debe superar los-18ºC, se deben transportar en bolsas térmicas o neveras portátiles desde la tienda a nuestra casa. Es conveniente comprarlos en último lugar antes de salir de la tienda.
• El alimento tiene que estar desprovisto de escarchas y cuando contiene muchas piezas, como las gambas, mejillones y verduras, se debe evitar que estén pegadas entre sí.
• Debemos respetar la fecha de caducidad del alimento congelado en su envase.
Normas para la congelación de los alimentos frescos:
• Para congelar las carnes y aves debemos eliminar toda la grasa y los huesos.
• El pescado se debe congelar limpio de escamas, tripa y cabeza después de lavarlo y secarlo.
• Antes de congelar verduras y hortalizas hay que blanquearlas. El blanqueado de verduras es una cocción interrumpida de verduras durante dos minutos en agua hirviendo antes de congelarlas. Esta técnica se realiza para evitar que se deterioren y se vuelvan pardas y para eliminar bacterias. Las verduras congeladas tardan menos en cocerse que si se hubieran comprado frescas. Las patatas no se deben congelar porque se endurecen.
• Los huevos no se deben congelar enteros porque se rompe la cáscara. Se debe congelar el huevo y las yemas batidas en tarros de cristal (poner la fecha).
• Los alimentos se deben congelar en bolsas de plástico o en recipientes de plástico rígidos.
El tiempo de congelación permitido para cada alimento es:
• Carnes rojas y cordero: 8 meses.
• Cerdo: 6 meses.
• Aves: 6-9 meses.
. Pescado azul, mariscos, pan y alimentos precocinados: hasta 2 meses.
• Frutas y verduras: 12 meses.
• Huevo batido: 6 meses.
Las carnes y pescados se sacan del congelador y se descongelan en la parte baja de la nevera. Nunca debemos descongelar a temperatura ambiente ni bajo el agua. También se puede descongelar en el microondas.
Es necesario limpiar el congelador como mínimo dos veces al año, aunque yo recomiendo que se limpie a fondo una vez al mes con agua y un poco de lejía para desinfectar.
ALIMENTOS ENLATADOS
Las conservas se realizan a partir de alimentos frescos de buena calidad que tras ser sometidos a un proceso térmico específico se envasan para que aguanten en perfectas condiciones durante más tiempo y se puedan consumir cuando el cliente quiera. No suelen llevar aditivos.
Los alimentos en conserva son tan nutritivos o más que los frescos, así por ejemplo el pescado en conserva contiene más calcio que el normal. Los pescados conservados con aceite contienen más grasa que el normal. Se debe elegir la conserva que no sea en aceite y baja en sal para evitar la hipertensión arterial y la obesidad. Las legumbres en conserva son menos flatulentas que las normales porque han sido cocidas previamente.
Los productos en conserva se presentan en frascos que tienen la ventaja de que su trasparencia nos permite ver el producto alimenticio, pero también presentan como inconvenientes que son más pesadas y frágiles, un golpe o caída las puede romper. Los alimentos en conservas presentan etiquetas de información nutricional en la mayoría de sus productos informando sobre los nutrientes voluntarios que incluyen, la cantidad de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, fibra soluble y no soluble, azúcar y otros carbohidratos, proteínas, sal, calorías, vitaminas y sales minerales.
Los alimentos enlatados deben reunir una serie de requisitos:
• Evitar las latas golpeadas y abolladas.
• Las latas abombadas contienen bacterias que se generan dentro del envase (clostridium botulinum, etc.).
• Se deben lavar las latas con agua y jabón antes de abrirlas.
• Elegir las fechas de caducidad más tardías. La fecha de consumo de las latas es muy larga, pueden durar meses o incluso años. Se debe respetar la fecha de caducidad, pues nos manifiesta hasta cuándo el alimento va a mantener sus características organolépticas. Pasada esta fecha sus características disminuyen. Una vez abierta la lata se debe consumir en 2-3 días el alimento y primero las latas más antiguas. Se aconseja el uso de latas más pequeñas.
Los efectos perjudiciales para la salud relacionados con la ingesta de alimentos en conservas son:
• Botulismo o intoxicación alimentaria producida por las esporas del Clostridium Botulinum. Este microorganismo elabora su toxina letal cuando lo introducimos en un frasco o recipiente cerrado, porque la espora germina cuando se encuentra en un lugar sin oxígeno como enlatados y conservas de PH menor de 4,5. Se encuentra en latas abombadas de espárragos, pimientos morrones, mejillones y berberechos. Después de 6 horas de ingestión del alimento aparece un cuadro clínico caracterizado por náuseas, vómitos, diarrea, boca seca, visión doble, dificultad para tragar, parálisis de las extremidades y de la respiración. Es muy grave, pero si seguimos un tratamiento con antitoxina botulínica la mortalidad desciende hasta un 20% de probabilidades.
• Contienen cantidades elevadas de sodio que generan problemas de hipertensión arterial y retención de líquidos cuando su consumo es frecuente.
• El consumo frecuente de latas de pescado con aceite genera obesidad y cifras elevadas de colesterol sanguíneo. Es recomendable consumir el atún al natural en lugar de con aceite.
• La presencia de aditivos alimentarios en las latas puede generar a largo plazo problemas de cáncer (algunos aditivos son precancerosos), alergias, inflamaciones. Los aditivos alimentarios son todas las sustancias añadidas a los alimentos para mejorar su sabor, conservación pero no su valor nutritivo. El consumo de alimentos enlatados debería ser ocasional, dos latas de atún a la semana.
SEMICONSERVAS:
Son conservas en ahumado o salazón no esterilizadas sino pasteurizadas a 50ºC. Estos alimentos se deterioran y es conveniente refrigerarlos hasta el momento de su consumo. Su fecha autorizada para el consumo son meses.
ALIMENTOS ENVASADOS
Son productos frescos, pelados, troceados y envasados para su consumo. No han sido sometidos a ningún tratamiento térmico, por lo que deben refrigerarse, y su periodo de caducidad es de entre 7 y 10 días. Suelen presentarse en los supermercados como productos frescos (carne, pescado, fruta o verdura y leche) en paquetes, tarrinas, bandejas o bolsas.
Se envasan en atmósfera controlada, sustituimos el oxígeno que rodea el alimento por nitrógeno o dióxido de carbono, con lo cual se reduce la contaminación microbiana del alimento y se evita su deterioro.
Deben guardarse en el frigorífico, nunca en la despensa, y consumirse como máximo la fecha de caducidad.
ALIMENTOS PRECOCINADOS
Son alimentos cocinados que se comercializan envasados y refrigerados. Para su consumo se necesita un calentamiento previo en el microondas sin necesidad de grandes manipulaciones, y muchas veces en el propio envase. Su fecha de caducidad es de 2-3 meses.
En el mercado podemos encontrar diversos tipos de precocinados:
• Congelados: quizás sea el grupo en el que se encuentra una variedad de precocinados. Por un lado encontramos aquellos que deben llevar un proceso previo de descongelación en la nevera antes de terminarlos de hacer. Es el caso de las recetas de carne, pescado. También están los productos que se elaboran en la sartén a fuego fuerte o en el horno a los pocos minutos. Son el grupo más consumido y se encuentran pizzas, patatas fritas, croquetas, verduras a la parrilla, arroces, pasta, etc.
• Conservas: sean en lata, envases de plástico o tarros de cristal, los productos que contienen están listos para calentarlos al baño maría o en el microondas y no necesitan frío, entre ellos destacamos la fabada, el cocido, las albóndigas, los arroces, etc. Envasados al vacío son pollo asado, tortilla de patatas, ect.
• Sopas y purés de sobre que se preparan añadiendo agua.
El 70% de los hogares españoles recurre a la comida rápida una vez a la semana según la CECU. Representan el 45% de los alimentos que comemos a diario.
Los alimentos precocinados son una buena opción para usarlos de comodín en ocasiones determinadas, pero no debemos basar nuestra alimentación en este tipo de alimentos.
Las ventajas de estos alimentos son la rapidez, la variedad para prepararlos, no necesitan conocimientos culinarios previos y la posibilidad de degustar platos de la cocina internacional.
Las desventajas de los alimentos precocinados son:
• El consumidor no conoce la cantidad exacta de los ingredientes ni el tipo de aceite empleado para cocinarlos.
• Suelen ser platos muy condimentados y a veces demasiado fuertes y provocan digestiones pesadas. Suelen tener un porcentaje mayor de sal, grasas saturadas y azúcares que son perjudiciales para la salud. Generan obesidad, esto explica que mucha gente engorde cuando se independiza.
• Sus características organolépticas como olor, sabor y texturas no son iguales que en los platos elaborados.
• Suelen llevar muchos aditivos que son perjudiciales para la salud.
EL IMPACTO DE LA COMIDA BASURA SOBRE LA SALUD
Una epidemia de obesidad y sus patologías secundarias como diabetes, enfermedades cardiovasculares, niveles altos de colesterol malo (y por cierto también puede predisponer al cáncer y a las enfermedades neurodegenerativas) amenaza a la población mundial, sobre todo en los países desarrollados. La OMS alerta de que en el año 2030 más de la mitad de la población mundial será obesa. Se sabe que una de las principales causas del problema es el consumo abundante de comida basura.
La comida basura la componen una serie de alimentos de comida rápida como hamburguesas, perritos calientes, kebabs, pizzas, patatas fritas, bolsas de aperitivos (patatas fritas, ganchitos al queso, Doritos, cortezas de cerdo, etc.), algunas galletas y bollos y refrescos azucarados. Estos alimentos que se sirven en restaurantes como Mc Donalds, Burger King, Doner Kebabs, algunas pizzerías, máquinas expendedoras de alimentos y algunas tiendas de frutos secos y alimentación no son nada saludables. La razón principal que desaconseja el consumo de estos alimentos es sus altos niveles de azúcar (muchas veces oculto), de grasas saturadas, de sal y cantidades de aditivos como el glutamato monosódico, que es un potenciador del sabor, y tartacrina, que es un colorante, y su ingesta es muy calórica (con altos niveles de calorías).
No debemos tentarnos por los precios económicos y el agradable sabor de estos alimentos, porque su consumo frecuente predispone a la obesidad y a numerosas patologías como diabetes, caries y periodontitis dental, depresiones y crisis de ansiedad, enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares, cáncer y enfermedades neurodegenerativas. También son la principal causa de la obesidad infantil. Debemos seguir una dieta mediterránea saludable siguiendo las recomendaciones de la actual pirámide de la alimentación.
Las personas que trabajan todo el día deberán cambiar el menú de una hamburguesería o pizzería o restaurante de comida rápida por un menú basado en la dieta mediterránea en un restaurante o llevarse un táper de comida casera al trabajo, que a la hora de la verdad resulta ser la opción más saludable y económica.
Los refrescos azucarados se deben consumir en la variedad light (sin azúcares añadidos); alternativas saludables son la cerveza con o sin alcohol, el vino (no más de 2 copas al día) y sobre todo las botellitas de agua mineral fresca. Los zumos de frutas deben ser recién exprimidos o batidos y no envasados, porque contienen mucho azúcar oculto.
Los aperitivos se pueden sustituir por frutos secos crudos como nueces, avellanas, almendras o, palomitas de maíz de elaboración casera, y nunca comprarlos en bolsas saladas (mirar la etiqueta a la hora de elegirlos).
Otra opción son los sándwiches de pan integral con jamón york y queso fresco y las frutas, que tantos beneficios aportan a nuestra salud.
Las galletas y los bollos más saludables se venden en herbolarios, en la zona BIO o DIET de algunos supermercados y en panaderías.
Bibliografía de los alimentos procesados y la comida basura:
Saber comer. Ana Bellón y Mariló Montero. Ed. Temas de hoy. Planeta.
Ventajas de los alimentos procesados consumer: https://www.consumer.es/seguridad-alimentaria/ventajas-de-los-alimentos-procesados.html
Los alimentos procesados que sí son buenos para tu salud. La vanguardia : https://www.lavanguardia.com/comer/materia-prima/20180420/442730116824/alimentos-procesados-saludables.htm
Congelación de los alimentos. www.consumer.es
Congelación de los alimentos. Cómo congelar y descongelar alimentos. Noalcubo.org http://noalcubo.org/index.php/aprovecho/la-congelacion-de-alimentos
Los peligros de comer enlatados. Mejor con salud. http://mejorconsalud.com/
Los alimentos precocinados. Alimentación sana. http://revistasana.org/los-alimentos-precocinados-una-mala-eleccion/
Definición de comida chatarra. Definición.de. http://definicion.de/comida-chatarra/
¿Sabías que la comida chatarra puede causar depresión? Mejor con salud. http://mejorconsalud.com/
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