Síntomas
La leucorrea es un aumento natural en el flujo vaginal, y puede llegar a ser molesto y perjudicial para la vida normal de una mujer. Existen muchos factores que pueden contribuir a su causa, y algunos síntomas pueden ser señales de una condición más seria. Se debe tener cuidado y reportar cualquier cambio inusual a un médico, cuando sea aplicable.
La descarga puede ser:
Oscura, con sangre, de color amarillo o blanco
Con olor agrio
Gruesa, acuosa, viscosa o espumosa
Otros síntomas pueden incluir:
Dolor durante o después del coito
Manchas en la ropa interior
Dolor de espalda o dolor abdominal
Dolor en la pierna, pantorrilla y el muslo
Micción frecuente, ardor al orinar
Fatiga o debilidad
Irritabilidad y falta de concentración
Malestar estomacal, como diarrea o estreñimiento o el aumento de la producción de gases
Dolores de cabeza frecuentes
Círculos negros u oscuros bajo los ojos
Picazón en la zona vaginal y alrededores, zona inflamada o enrojecida
Causas
Existen muchas causas para la leucorrea, la más frecuente es el desequilibrio hormonal (ej. durante el embarazo), pero también puede ser causada por una infección o irritación de las membranas que recubren los órganos genitales.
Otras causas pueden ser:
Cremas espermicidas, ungüentos y jaleas que se uses como anticonceptivos y que pueden irritar el revestimiento vaginal
Ciertas condiciones médicas como la diabetes y la anemia
Infecciones bacterianas o micóticas
Irritación causada por el DIU (dispositivo intrauterino utilizado como anticonceptivo)
Lesión en el cuello del útero o de la vagina, causada por la actividad sexual, lesión muscular, parto o abortos involuntarios.
Condiciones antihigiénicas, que conducen a la acumulación de bacterias dentro y alrededor de la vagina
Relaciones sexuales
Enfermedades de transmisión sexual
Cambios en la menstruación, como el inicio de la pubertad, la menopausia o los cambios asociados con el embarazo
También existen varias clasificaciones para la descarga, que tienen nombres y síntomas específicos.
Cervicitis
La cervicitis es, a menudo, indicada cuando el dolor de espalda está presente. La cervicitis es causada cuando el cuello uterino se inflama. Esto puede ocurrir debido a causas infecciosas, como las enfermedades de transmisión sexual, pero las causas no infecciosas también son posibles, como las reacciones alérgicas a los productos lubricantes o espermicidas, condones de látex, diafragmas anticonceptivos y dispositivos intrauterinos (DIU).
Candidiasis
Esta condición se presenta con mayor frecuencia en las mujeres embarazadas o diabéticas, o también en las mujeres que toman píldoras anticonceptivas o ciertos antibióticos. Los cambios hormonales y anticonceptivos orales se ha demostrado que cambian el pH en el cuerpo de una mujer y pueden conducir a infecciones por hongos. Otros factores que pueden contribuir a las infecciones vaginales por hongos son el uso de prendas interiores sucias o húmedas durante largos períodos de tiempo y las condiciones insalubres.
Tricomoniasis
La vaginitis por tricomonas, también llamada tricomoniasis o tricomonas, se manifiesta como una secreción amarilla y, a veces espumosa junto con picazón. Es comúnmente causada por enfermedades de transmisión sexual, pero también puede ser causada por los juguetes sexuales sucios, toallas mojadas y ropa interior sucia o húmeda, usada ??por largos períodos de tiempo. Los síntomas pueden aparecer dentro de 3 a 28 días después de la infección y pueden crear desde una leve molestia a complicaciones graves.
Factores de riesgo
El riesgo principal para la leucorrea es que se convierta en una enfermedad crónica o una infección grave. Esto ocurre si no se la trata en sus etapas iníciales. En algunos casos, la descarga puede ser causada por otras enfermedades, como ETS, y debe tratarse de inmediato. Cuando el flujo es causado por una infección debe ser tratado tan pronto como sea posible para evitar que la infección se propague por todo el cuerpo.
Consejos de prevención
La mejor prevención es mantener el cuerpo limpio y alimentarse con una dieta saludable junto con el consumo adecuado de agua. El uso de ropa interior cómoda, “respirable” y cambiarla a menudo, también ayudará a evitar la acumulación de bacterias que pueden causar la leucorrea. Las mujeres que nadan o hacen ejercicio con frecuencia, deben cambiarse la ropa húmeda tan pronto como sea posible para evitar la formación de las condiciones que conducen a la leucorrea. Los niveles de estrés bajos y los hábitos de sueño saludables también pueden reducir la tensión en el cuerpo.
Otras formas de prevenir problemas con leucorrea incluyen:
Evita el uso excesivo de productos diseñados para la higiene femenina. Esto puede incluir protectores diarios, compresas, tampones, duchas vaginales y los aerosoles femeninos.
Evita la contaminación de la zona vaginal limpiándote siempre de adelante hacia atrás después de defecar y manteniendo prácticas de higiene adecuadas.
Usa correctamente condones y otros tipos de barreras, como protectores dentales en cualquier relación sexual. Cuando existe una infección, abstente de la actividad sexual durante el tratamiento, para evitar la propagación de la infección.
Pruebas y diagnóstico
Como la leucorrea puede ser normal, a menudo puede ser pasada por alto. Si la descarga tiene mal olor o es colorida, consulta a un médico para descartar otras condiciones. En las mujeres jóvenes, esto puede ocurrir antes de la aparición de la pubertad y puede ser una indicación de que comenzará la menstruación.
Opciones de tratamiento
Las opciones de tratamiento varían debido a la amplia variedad de causas. En algunos casos, la leucorrea puede resolverse, pero si la condición empeora o cambia, un médico debe ser consultado. La prevención es el mejor tratamiento.