La sal produce adicción. Se ha comprobado científicamente y explicaría por qué en España consumimos el doble de lo aconsejado. Esto pone en jaque a nuestra salud porque el exceso de sal en la dieta puede provocar problemas cardíacos, hipertensión, osteoporosis o cáncer.
Se recomienda tomar entre 5 y 6 g de sal al día (entre 2.000 y 2.330 mg de sodio), pero entre el sodio que ya contienen los propios alimentos, el uso del salero al cocinar o en la mesa y la cada vez mayor presencia de precocinados en la dieta, acabamos ingiriendo una media de 11 g (4.274 mg) diarios, es decir, casi el doble de la cantidad considerada saludable.
Una de las explicaciones a este exceso pueda estar en que la sal “engancha” tanto como una droga, según ha alertado la Sociedad Española de Cardiología (SEC) citando un estudio elaborado por las Universidades de Duke y Melboume (Australia). En este estudio se ha comprobado que el consumo de sal activa en el cerebro los mismos mecanismos neuronales de placer y recompensa que la cocaína, lo que resulta tremendamente adictivo.
Reduce el consumo de productos procesados y, si los consumes, escógelos bajos en sal, comprobando la etiqueta.
PERJUDICA TANTO LA SALUD COMO OTRAS ADICCIONES
Entre los peligros de la sal para la salud está la retención líquidos, el aumento de la presión arterial, y dolencias graves como diferentes cánceres.
PAN Y PRECOCINADOS, PEOR QUE EL SALERO
Más del 80% del consumo diario de sal proviene de productos procesados y precocinados, en los que se usa como saborizante, conservante o para lograr textura y consistencia.
Cuidado con el pan. Al ser un producto cotidiano, supone casi la mitad del consumo diario de sal recomendado (2,2 gramos). Hacer el pan en casa controlando la sal añadida es una sana alternativa.
Modera el consumo de procesados. Caldos, cremas y sopas, embutidos o surimi encabezan la lista de los alimentos precocinados con un mayor aporte de sal. Los cereales de desayuno, bollos y galletas, pese a ser dulces, pueden contener mucho sodio.
También en medicinas. Las pastillas efervescentes contienen sodio para disolverse y hacer burbujas. Evítalas si debes seguir una dieta baja en sal.
LOS MISMOS BENEFICIOS QUE DEJAR EL TABACO
Lo confirma la Fundación Española del Corazón: rebajando a la mitad el consumo diario de sal se evitaría la retención de líquidos y la hipertensión, causante del 62% de los accidentes cerebro- vasculares y del 42% de las enfermedades del corazón.
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