"Inmune" viene del latín y significa "libre de". El sistema inmune es el encargado de mantener el organismo libre de agentes externos o internos capaces de producir alteraciones o enfermedades. Podemos ayudar a nuestro cuerpo a mantenerse saludable. Hoy os quiero hablar de los hongos asiáticos, muy utilizados en la medicina tradicional asiática por sus propiedades medicinales.
REISHI (ganoderma lucidum)
Es una especie de hongo rojo muy conocido y usado en China y Japón. No es comestible, se toma en forma de complemento. Es un potente antioxidante, lo que le confiere un efecto potenciador sobre el sistema inmune. Contiene sustancias muy beneficiosas para nuestro cuerpo, estas son las más importantes:
-Polisacáridos: moléculas que estimulan a las células fagocitarias del sistema inmunitario llamadas macrófagos (natural Killer) o células asesinas, que destruyen a las células malignas. Gracias a ellas se refuerza nuestro sistema inmune.
Se incrementa la producción de Interferón. Si hay algún virus, toxina o bacteria perjudicial en nuestro cuerpo, el interferón interfiere para impedir que se quede. Los polisacáridos se adaptan al estado del sistema inmune y esto lo convierte en un adaptógeno, si el sistema inmune está débil lo fortalece. Si está fuerte, lo mantiene.
Otro polisacárido es el Lentiman, que equilibra el nivel de azúcar en la sangre.
-Adenosina: nucleótido que activa el sistema metabólico, elimina el exceso de colesterol y triglicéridos, previene e inhibe la agregación de plaquetas de la sangre, evitando el bloqueo en la circulación (coagulación sanguínea), facilita la circulación de la sangre en los vasos obstruidos por las grasas y lípidos. Ayuda en la contracción muscular y en el metabolismo del azúcar. Tiene efectos calmantes y sedantes.
-Ergosterol: fitoesterol precursor de la vitamina D2, cuyo contenido en este hongo es convertido en dicha vitamina cuando las setas se deshidratan bajo la luz del sol. Es necesario para la absorción del calcio y fósforo. Reduce el riesgo de desarrollo de tumores.
-Ácido ganodérmico: fitonutriente que le confiere un elevado grado de actividad antioxidante. Favorece la erradicación de enfermedades de la piel. Inhibe la síntesis del colesterol. Rejuvenece las células y tejidos del cuerpo restaurando los órganos.
-Triperpenos: son los componentes anti-alérgicos, estos previenen la ruptura de los mastocitos (no se libera histamina). Brindan una acción similar a la insulina, reducen la glucosa en la sangre, hasta llegar a los valores normales. También tienen un efecto muy beneficioso en el hígado.
-Germanio Orgánico: aporta muchisimos minerales y ayuda en la circulación sanguínea, fortalece nuestro sistema inmune y nos protege de la entrada de agentes patógenos.
Anticancerigeno, elimina tumores, quistes, miomas, oxigena la sangre, fortalece el sistema inmune del cuerpo, reduce la fatiga y aumenta la vitalidad.
La sinergia entre estas sustancias es lo que hace que este hongo aporte tantos beneficios a nuestro cuerpo.
A continuación os voy a hablar de otros hongos, y aunque aquí no los conocemos, ni usamos, en la medicina tradicional china, llevan milenios utilizándolos.
SHIITAKE (lentinus edodes)
Es delicioso, yo lo he comido. Con notables propiedades antivirales y antibióticas, y moléculas con capacidad para combatir el exceso de colesterol y triglicéridos en la sangre. Posee además acciones estimulantes de la libido y la fertilidad.
Muchos oncólogos holísticos recetan setas shiitake para prevenir el avance y propagación del cáncer.
MAITAKE (grifola frondosa)
Se utiliza en Japón como terapia complementaria a los tratamientos convencionales del cáncer por su contenido en moléculas antitumorales. Aporta también sustancias antiinflamatorias y analgésicas. Las setas maitake tienen un efecto beneficioso en la salud cardiovascular y la diabetes, además de ser anticancerígenas. También bajan la presión arterial y regulan la glucosa en la sangre.
MELENA DE LEÓN (hericium erinaceus)
Contiene sustancias que estimulan la generación del factor de crecimiento neural (NGF), con efectos frente al alzhéimer y el parkinson, así como la depresión y la ansiedad.
EL CHAMPIÑON DEL SOL (agaricus subrufescens)
Una delicia gastronómica, con propiedades reguladoras del sistema inmune que permiten combatir con eficacia tanto enfermedades autoinmunes como alergias.
SETA-ORUGA ( cordyceps sinensis)
Es poco conocida, aunque su capacidad para incrementar la vitalidad, la libido, la fertilidad, y ser una protectora renal y estimuladora de la capacidad respiratoria.
COLA DE PAVO ( coriolus versicolor)
Otra seta no comestible de larga tradición oriental que se usa como adyuvante de tratamientos contra el cáncer, tanto por acción de su contenido en moléculas antitumorales como por su poder de estimular la actividad del sistema inmunitario.
ENOKITAKE (flammulina velutipes)
Se trata de una preciada seta invernal que, además de poseer un delicado sabor y textura, contiene varios principios activos antivirales y antibióticos, al tiempo que regula de manera eficaz el sistema inmunitario.
POLYPORUS ( polyporus umbellatus)
Esta seta no comestible combina su acción bactericida con sus propiedades diuréticas, por lo que resulta eficaz en infecciones urinarias. Pero también destaca por sus efectos antitumorales y antimetastáticos entre otros.
SETA OSTRA (pleurotus ostreatus)
Su sabrosa carne blanca, destaca por su alto contenido en lovastatina, el compuesto natural que sirvió de modelo para la creación de las estatinas sintéticas utilizadas para combatir el colesterol. Por si fuera poco, sus extractos también contienen potentes antioxidantes y protectores hepáticos.
Fuentes consultadas: revista Cuerpo Mente, libro La alimentación como medicina, publicaciones del Dr. Joseph Mercola...