Cuanto más casero, mejor.
Sabemos que la vida ajetreada de hoy en día no da mucho tiempo para cocinar como se debe, pero os recomendamos sacar tiempo para cocinar todo lo posible y dejar a un lado los productos procesados.
No hace falta que lo hagáis de golpe, pero sí id haciéndolo sin pausa.
Los alimentos procesados ya inundan los supermercados: pizzas, carnes ya picadas, sopas instantáneas, pastillas de caldo, bollería, aperitivos salados, platos preparados, panes de molde y similar, galletas, salsas,...
Sí, pueden ser apetecibles y sacarnos de un apuro, pero ¡¿has leído las etiquetas?!
La gran mayoría abusan de la sal, el azúcar refinado y derivados, harinas refinadas, grasas vegetales poco saludables (la de palma inunda el mercado y es horrible en todos los sentidos), añadidos químicos para mejorar sabor, textura y durabilidad,...
Para cualquier alimentación saludable y para bajar de peso de forma sana, ¡evítalos a toda costa!
Nosotros solemos aprovechar el domingo que estamos todos en casa para ir preparando elaboraciones para toda la semana, incluidos caprichos como un bizcocho y galletas. ¿La diferencia? Controlas lo que le pones y la cantidad de lo que le pones.
Sólo con reducir la cantidad de grasas tipo de palma, exceso de azúcar refinado (que no sólo llevan los productos dulces) y harinas refinadas, verás como tu estómago y metabolismo te lo agradecen.
Nos leemos pronto... ¡buenas cocinillas a todos! ^_^