En este simposio se habló de que lo más importante (aparte de la curación) ante el cáncer de mama es afrontarlo. Esta enfermedad, imprevisible y muy dañina para la mujer, tiene un doble impacto: emocional y físico. Resulta muy duro para la afectada enfrentarse a este agresivo padecimiento psicológica y también físicamente, ya que el tratamiento y la enfermedad provocan cambios en el cuerpo como menopausia precoz, molestias óseas y posibles efectos secundarios del tratamiento.
Sin duda, prepararse contra el impacto emocional es muy positivo, y facilita el tratamiento. Un apoyo familiar constante puede hacer maravillas, pero también existen charlas y grupos de mujeres que han superado el cáncer y que comparten vivencias y se dan apoyo mutuo. Hay mujeres con un ambiente familiar sólido, y mucho carácter, que no necesitan estos grupos. Sin embargo, hay médicos e investigadores que sostienen que el tratamiento psicológico debería ir de la mano con el tratamiento de la enfermedad.
Convertirse en una superviviente de cáncer de mama cambia completamente la vida. No sólo reordena las prioridades en la vida de la afectada, sino también la manera que tiene de verse a sí misma, y la relación con los demás.
¿Has superado un cáncer de mama o conoces a alguien que lo haya hecho?