El día 19 de octubre se celebra el Día Internacional contra el Cáncer de Mama, jornada que no desaprovechan las distintas autoridades y asociaciones para ofrecer información a la ciudadanía.
Un día de color de rosa
Durante este simbólico día podemos observar como, solidariamente, muchas de nuestras ciudades se tiñn de rosa, el color que expresa la lucha diaria de todas esas mujeres para poder hacerle frente al cáncer. Tal y como muestran las estadísticas, este tumor es el más común entre las féminas, llegándose a hablar de que una de cada diez españolas desarrollará esta enfermedad a lo largo de su vida. La cara amable de todo esto la dan los datos que demuestran que cada vez se consiguen mejores resultados en los tratamientos, gracias a la posibilidad de detectar el tumor en los estadios más precoces.Esta rapidez en el diagnóstico es lo que hace, según afirman desde el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM), que "cada vez aumenten más los casos de mujeres sometidas a cirugía conservadora", es decir, aquellas que pueden sobrellevar la enfermedad sin tener que perder la mama y sin sufrir las consecuencias psicológicas que esto supone.
Cada paciente es única
Precisamente, estos datos son los que se han querido resaltar en esta campaña informativa llevada de la mano de la Sociedad Española de Oncología (SEOM) y de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), quienes apuestan por "un mensaje más positivo que tiene que ver con que la forma de tratar el cáncer ha cambiado".La variación se encuentra en el lema que explica la campaña y que defiende que "cada mujer es única" con respecto al cáncer de mama, y por ello precisa de un "tratamiento individualizado que se adapte y mejore su calidad de vida". Los expertos aseguran que esta nueva visión "se traduce en una mayor supervivencia que hace posible que hoy podamos observar cómo más del 90% de las pacientes vencen el cáncer, siempre y cuando se haya detectado de forma precoz".
Un repaso a la enfermedad
Como su nombre indica, este tumor se caracteriza por incidir directamente sobre las glándulas mamarias, exactamente "sobre aquellas destinadas a la producción de leche o en las células que recubren los conductos que hacen llegar la leche al pezón", explican los especialistas. Si no se detecta a tiempo, el cáncer se extiende paulatinamente hasta poder alcanzar la mama o incluso pudiendo afectar a los ganglios linfáticos situados en la axila. Cuando afecta a otras partes del cuerpo recibe el nombre de cáncer de mama metastático.Aunque es difícil delimitar unos determinados grupos de riesgo, parece ser que aumenta el peligro para aquellas personas que "hayan tenido su primera menstruación de forma temprana, una menopausia tardía y hayan sido madres primerizas a una edad avanzada", revelan los expertos. Asimismo, advierten de que algunos hábitos de vida como el sedentarismo, una dieta poco equilibrada, el tabaquismo y la ingesta excesiva de alcohol, pueden aumentar el riesgo considerablemente. No obstante, en los últimos años, también se ha avanzado mucho en revelar aquellos aspectos genéticos que nos puedan situar en un grupo más proclive a padecer este trastorno.
En una afección en la que los síntomas iniciales son prácticamente nulos, cobra especial relevancia que las mujeres conozcan su cuerpo y lleven a la práctica tanto los consejos de sus ginecólogos como unas revisiones periódicas, que se aconsejan a partir de ciertas edades. Afortunadamente, hoy podemos hablar de que hay esperanza y mucho mundo después de la enfermedad.
Más información: Sociedad Española de Oncología (SEOM) y de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA).