¿En oportunidades tienes un cansancio y una fatiga que no te explicas?
¿Sufres de dolores de cabeza?
Capaz llegas a sentir el cuerpo tan pesado que no logras realizar tus actividades diarias, ya sea de trabajo o de escuela.
Pues, esos son síntomas claros de anemia, una enfermedad que no deja de aparecer en personas de diferentes edades, alrededor del mundo, y lo peligroso es que muchas veces no se toman las medidas necesarias para contrarrestar sus efectos.
¿Qué causa la anemia?
La anemia generalmente es causada por la falta de hierro en el organismo, aunque algunos expertos han afirmado que también puede darse por un exceso de este mineral, porque las células no pueden procesarlo.
Además.
Muchas anemias se detectan tras realizar dietas fuertes sin ningún tipo de control, incluso en edades de crecimiento, mientras que las personas vegetarianas también pueden sufrir de anemia, ante la falta de hierro.
Claro.
Que la ausencia de hierro está relacionada con más del 50% de los casos de anemia, más allá de que existen otras carencias que las generan, como de ácido fólico o vitamina B12. Incluso, las más comunes, son las anemias heredadas por malnutrición, trastornos hormonales o por parasitosis.
¿A que nos referimos con Anemia?
Al hablar de anemia, nos referimos a la insuficiencia de glóbulos rojos en la sangre, que genera la reducción de la hemoglobina en la sangre, que llega a un nivel mucho menor de lo que necesita el organismo.
La hemoglobina es la proteína de la sangre que transporta oxígeno desde los pulmones a otras partes del cuerpo, como los músculos, donde son liberados.
Es una proteína rica en hierro, que se almacena en los glóbulos rojos, así que su reducción indica directamente en el cansancio, la fatiga e incluso, la dificultad para respirar de los que sufren anemia.
El oxígeno es muy necesario para el funcionamiento de los tejidos y para todas las fuentes de energía de nuestro organismo, como la glucosa, que ayuda en la contracción muscular, así como la conducción de los impulsos nerviosos.
Perdemos parte de estos beneficios del oxígeno, ante la falta de hierro que reduce la hemoglobina en la sangre, con lo que no transporta el oxígeno de la forma que necesitamos, algo que nos afecta, generando esa falta de energía que, en muchas ocasiones, no nos permite realizar lo que queremos o cumplir objetivos.
Ojo.
Que la concentración de hemoglobina normal en la sangre es de 16 g/dl en los hombres y de 14 g/dl en las mujeres. Mientras que en el caso de sufrir anemia, la concentración de la hemoglobina en los hombres será inferior a 14 g/dl en hombres, o de 12 g/dl en mujeres.
Síntomas de la Anemia
La anemia genera una gran cantidad de síntomas, que inciden en nuestro día a día, porque limita nuestras fuerzas, tantos mentales, como físicas, además que desmejora nuestra calidad de vida.
Dentro de los síntomas tenemos:
Sensación de cansancio continuo, sin ningún motivo aparente.
Palidez
Palpitación del corazón, con poco esfuerzo.
Fatiga
Falta de aire al hacer deporte
Pueden llegar a sufrir mareos
Pérdida de concentración
Falta de ánimo
Vértigos
Depresión
Uñas y cabello débiles.
Las mujeres en la adolescencia, embarazadas o sangrados anormales, deben realizarse exámenes de sangre, sufran o no los síntomas
¿Cómo evitamos la anemia?
Para evitar la anemia podemos implementar algunas de estas acciones:
La alimentación es una de las claves. La comida debe ser balanceada y equilibrada.
Cenar de una manera ligera.
El desayuno debe ser energético.
Descansar muy bien en las noches.
Organizarnos correctamente, para evitar problemas y agobios.
Relajarnos para evitar el estrés. Buscar maneras de relajarnos, puede ser con música, un baño o meditación.
Realizar una sesión de ejercicio.
Darle la importancia que merecen a las cosas
La Alimentación es clave
Tenemos que cuidar mucho nuestra alimentación para no sufrir anemia, porque la intención es evitar que se reduzcan los niveles de hierro en el organismo, por lo que hay comidas, que no pueden faltar en la dieta diaria.
Hay que dejar claro, que el hombre necesita 9mg de hierro diariamente, mientras que las mujeres requieren 18 mg, así que en caso de tener una cifra menor, comienzan a darse algunos síntomas.
Lo ideal puede ser consumir pastillas que contengan hierro Y agregar alimentos adecuados a la dieta como estos:
Carnes rojas: Son claves las carnes rojas, especialmente hígado o morcilla. Además, el pollo también es fundamental. El hierro que viene de origen animal se asimila mejor.
Legumbres: Como las espinacas, las acelgas o las lentejas.
Frutas y verduras
Pescado y marisco: Los pescados y otros frutos del mar, como almejas y mejillones, contienen hierro.
Frutos secos: Los frutos secos, como las nueces, pueden ayudarnos.
Cereales: Pueden reducir la fatiga, tras consumirlo dos semanas.
Agua: Debemos mantenernos hidratados para combatir la anemia.
fuente
Ojo.
Que lo mejor es olvidarnos un poco del café, la leche, el té y la fibra, para evitar la anemia.
Como te das cuenta, con algunos cambios en tus hábitos, puedes aumentar el hierro y evitar la anemia, para poder llenarnos de fuerza.
Ojo, que también existen casos en que la falta de energía, se da por desequilibrios en los niveles de glucosa en la sangre, por lo que en ese caso recomiendan no excedernos en el consumo de azúcar, ni de demasiada proteína de origen animal, además de comer cada tres horas, para evitar grandes picos de glucosa.
En esos casos también influye mucho nuestro estilo de vida, porque si somos sedentarios, no descansamos lo suficiente, no desayunamos bien y vivimos con un estrés, pues tendremos falta de energía, por lo que es clave cambiar nuestros hábitos y especialmente intentar descansar mejor, mantenernos hidratados, mantener una alimentación balanceada, comer tres horas antes de dormir, así como realizar ejercicios.
Al final, depende de nosotros, del esfuerzo que tengamos en poder tener una mejor calidad de vida, llena de vigor y energía, con lo que podremos alcanzar los objetivos que tenemos.