Aún así, del 60% de intentos de abandono que se hacen, un 25% recae al primer día, un 40% aguanta entre dos y siete meses y sólo un 12% supera los tres meses sin fumar. Esto se debe, sobre todo, al síntoma de abstinencia. La 'Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria' (semFYC) nos ha dejado unas recomendaciones sobre qué hacer en el caso de sufrir del mismo y de padecer otras reacciones comunes:
- En el caso de desear fuertemente fumar hay que respirar profundamente y buscar técnicas de relajación. Beber agua o zumos o comer chicle le ayudará a ir superándolo.
- Si comienzas a padecer insomnio evita el café o bebidas con cafeína. Realiza ejercicio para llegar más cansado a la cama y bebé infusiones relajantes.
- En caso de estreñimiento opta por una dieta rica en fibra.
- Si te pones muy nervioso consulta a un especialista sobre técnicas de relajación y distracción.
- Es habitual que el apetito aumente cuando estamos intentando dejar de fumar. Bebe mucha agua y zumos para mantenerte saciado sin incorporar excesivas calorías a tu organismo.
- Por último, si comienzas a padecer un cansancio anormal aumenta tus horas de sueño y descanso hasta que la situación se regule.
Sobre todo, confía en tu fuerza de voluntad y tus ganas de acabar con este vicio, ¡tu salud y tu organismo te lo acabarán agradeciendo!