'¿Por qué estoy perdiendo pelo?' es probablemente la pregunta más frecuente entre los hombres, y la respuesta nos deriva a los distintos tipos de alopecia que podemos encontrar:
- Alopecia areata. Se trata de la caída del cabello en una zona concreta del cuerpo y en forma de parches redondos. Es una enfermedad autoinmune, de la que no se sabe su origen exacto. Así, el cabello puede o no volver a aparecer.
- Alopecia cicatricial. Este tipo de problema se da cuando el cabello se cae y en el folículo aparece tejido cicatricial, de forma que nunca más podrá volver a salir. Puede deberse a causas hereditarias, problemas dermatológicos, infecciones, heridas, quemaduras, ciertas enfermedades...
- Alopecia difusa. La pérdida de cabello se produce de forma gradual y generalizada, y puede deberse a causas como una medicación concreta, una falta de nutrientes, mala alimentación, estrés, ansiedad...
- Alopecia androgenética. Es el problema más común cuando hablamos de calvicie en los hombres. Se trata, básicamente, de una pérdida de cabello derivada de causas genéticas y hormonales, que influyen en los ciclos de crecimiento capilar. Así, se suele apreciar por la aparición de entradas, el retroceso de la línea de crecimiento del cabello, la pérdida de densidad en la coronilla...
''Se me cae mucho el pelo, ¿me estoy quedando calvo?''
Antes de alarmarnos y empezar a lamentar la llegada de ese temido momento para muchos hombres, debemos pararnos a pensar (a respirar) y a valorar si realmente estamos ante un problema de alopecia. ¿Cuáles son los síntomas?
- Si empezamos a observar que hay una cantidad exagerada de pelos en la almohada, en el cepillo, en el lavabo, en la ducha... En cualquier caso, es importante recordar que al día se caen muchísimos pelos (según dicen algunos estudios, más de 100)... Además, en estaciones del año como la primavera y el otoño la caída del cabello es más común, por lo que debemos intentar no agobiarnos.
- Si padecemos de picores, caspa... puede que tengamos algún tipo de dermatitis, que esté provocando la caída del cabello, y que podemos tratar.
- Si comenzamos a observar pérdida de cabello en frente, en la coronilla, en las sienes... en ese caso puede que estemos ante una alopecia androgenética. Es lo que podemos denominar como patrón en forma de M, aunque en algunos hombres la pérdida de cabello se suele dar en forma de U.
- Un signo clave es controlar la línea de crecimiento del cabello y observar (podemos comparar con fotografías del pasado) si esta está retrocediendo.
- Si la pérdida es generalizada y se ha exagerado en un periodo concreto de tiempo, puede deberse a un problema de alopecia difusa asociada a una situación de estrés, mala alimentación, una medicación concreta...
En cualquier caso, ante la duda, sobre todo si puede llegar a suponer un problema psicológico o de autoestima para nosotros, lo mejor es recurrir a un dermatólogo, que nos ayude a identificar si estamos ante un problema de alopecia y, en caso de que así sea, valorar de qué tipo de es y si puede ser tratado.
Lo que todos estabais esperando... ¿cómo podemos prevenir la caída del cabello?
Aunque no podemos luchar contra la genética, si que podemos tener en cuenta ciertas medidas que nos van a ayudar a reforzar el cabello, prevenir la alopecia y presentar una buena salud capilar.
- La alimentación. Una mala alimentación puede conllevar a una falta de nutrientes, que derivan en la caída del cabello. Por ello, debemos llevar una dieta equilibrada, que incluya alimentos ricos en omega 3 y omega 6 (pescado), en fibra (legumbres), en vitamina B (huevos, arroz...)...
- Evitar el estrés. La ansiedad es uno de los principales causantes de la aceleración en la caída del cabello, por lo que es conveniente controlarlo: dormir bien, hacer deporte, realizar prácticas de relajación...
- Cuidado del cabello. El ritual que sigamos para cuidar de nuestro pelo es fundamental. Dentro de esto incluimos pautas como tenerlo bien hidratado, masajear bien el cuero cabelludo al lavarlo para reactivar el flujo sanguíneo, secarlo al aire libre o con el secador a media temperatura, cortarlo de vez en cuando, protegerlo del sol, no frotar de forma excesiva con la toalla, terminar el lavado con agua fría...
- La importancia del champú. Es quizás el punto más importante de cara al cuidado del cabello. Así, lo importante es emplear un producto que se ajuste a nuestro tipo de cabello (graso, seco, teñido...). Por su parte, existen champús elaborados a partir de fórmulas específicas para prevenir la caída del cabello. Se trata de productos que presentan en su composición ingredientes que favorecen el fortalecimiento del cabello, como es el caso de nuestro champú de cafeína.
¿Qué beneficios tiene la cafeína en el cabello?
- La cafeína contrarresta los efectos de la testosterona, que en casos de predisposición hereditaria, afecta al aporte de energía en las raíces capilares.
- Aplicada directamente sobre las raíces (a partir de un champú) ayuda a mantener los ciclos de crecimiento del cabello.
- Fortalece la densidad capilar. Y tú, ¿cuidas correctamente de tu cabello?