¡Muy buenas!
¡Nunca es tarde para poner remedio! ¿Por qué os digo esto? Hace unos meses me fui informando sobre cómo mejorar mi salud dental y decidí ir al dentista que, tras un diagnóstico inicial, es quien mejor nos puede orientar sobre que mejoras necesita nuestra boca.
Una sonrisa bonita, sin lugar a dudas lleva implícita unos dientes con cierta estética, es decir, unos dientes limpios, blancos, alineados y con formas regulares. Para todo esto, hay muchos tratamientos de estética dental tales como: blanqueamiento, ortodoncia (es el tratamiento que llevo ahora) y corona dental.
Pero el motivo de este post no es curar propiamente dicho con la estética dental, sino más bien prevenir y cuidar la salud dental ya que, muchísimas veces, ¡prevenir, es curar!
4 HÁBITOS PARA CUIDAR NUESTRA SALUD DENTAL
Alimentación para la salud dental
La alimentación es súper importante para nuestro organismo en general, y como no, no podía dejarse al margen el cuidado de nuestra salud dental, incluyendo en ésta claro está, las encías.
Come una manzana al día, pero ¡a bocados! Aparte que fortalece encías y dientes, la manzana nos protege de forma eficaz de la dichosa placa bacteriana.
También, como no, no podían faltar los ácidos grasos esenciales tales como Omega 3, el calcio y mucha fruta y verdura.
¿Qué decir de la temida caries? Evita o elimina el azúcar.
“Stop” al tabaco, café y chocolate
Servidora fue fumadora y ahora se arrepiente ya que, amarillenta enormemente los dientes al igual que, el café y el chocolate.
No te diré que elimines 100% en cambio, el chocolate y el café (porque yo misma tomo un café diario) pero sí que, los reduzcas en la medida que puedas ¿de acuerdo?
Limpieza dental
Es algo de sentido común limpiar nuestros dientes, ¿verdad?, pero no es menos cierto que, muchas veces no se realiza correctamente o de la forma más adecuada.
Cepillarlos 3 veces al día es primordial para mantener nuestra salud dental; para ello, en primer lugar, debemos elegir un cepillo de dientes adecuado para nosotros e hilo o seda dental, para eliminar restos de comida que hayan podido quedar almacenados entre nuestros dientes y que, son caldo de cultivo para producir en un futuro la temida caries.
¡Ah! Elige una pasta de dientes adecuada y si así lo deseas, puedes incluir una pasta de dientes con flúor, aunque hay mucha controversia en este tema. ¿Sí o no al flúor incluido en las pastas de dientes? Esto mejor que nadie te lo puede aconsejar un dentista, donde vamos a tratar este tema en el siguiente apartado.
Visitar el dentista
Como decía al principio, él mejor que nadie un dentista- para conocer con exactitud el estado verdadero de tu boca.
En mi caso, iba a empezar por el blanqueamiento, pero tras un diagnóstico iniciar, vio necesario primero, iniciar un tratamiento para dientes sensibles, ya que, con los blanqueamientos aún se tornan más sensibles al frío y al calor.
Te digo esto a modo de ejemplo, porque a veces pensamos que necesitamos una cosa de forma prioritaria, y no es así. Pasito a pasito con ayuda profesional es lo más recomendable.
¡Nos vemos en el próximo post!
Un abrazo,