Como humano que eres experimentas, entre otras, cuatro emociones básicas: alegría, tristeza, miedo y rabia. ¿No es así? Párate a pensar, seguro que, en menor o mayor medida, sabes de qué te hablo y gracias a ello puedes decir que eres un tipo sano.
Y te preguntarás: Si tan sana es la tristeza, ¿por qué muchos me juzgan o me fuerzan a que salga de este estado provocándome justo lo contrario?
Aquí tienes un brevísimo listado con las 3 peores maneras de ayudar a alguien cuando se siente triste y alternativas súper aconsejables para cuando deseches las anteriores:
1. Si estás así es porque quieres
Los estados emocionales no se pueden forzar. Y si lo pretendes, puede que precisamente consigas el efecto contrario. Cuando alguien te manda un mensaje similar a éste, de entrada, está penalizando tu emoción de tristeza (Venga, sal de ahí, ¡esfuérzate!). Pero por otro lado, puede que te esté haciendo sentir peor y tremendamente frustrado. Es obvio que prefieres estar contento, pero el cuerpo te pide teñirse de melancolía. ¿Tan incompetente soy para ni siquiera poder salir de la tristeza?, te preguntas.
Qué tal si pruebas a decirle: Te noto triste, ¿quieres hablar sobre ello y desahogarte?.
Nos empeñamos en aconsejar y esmerarnos en que el otro vea de color de rosa su situación para que se sienta aliviado, pero el mejor alivio es que le escuchemos sin juzgarle.
Por desgracia, continuamos llorando a escondidas. ¿No te parece increíble que muchos de mis pacientes me pidan disculpas cuando dejan caer sus primeras lágrimas?
2. Hay gente que se está muriendo y tú así
Siempre habrá gente que esté peor y mejor que tú. Pero la comparativa con situaciones catastróficas no es para nada aliviante. El ser humano es egocéntrico por naturaleza y antepone sus necesidades a las de los otros. Que el vecino de arriba se haya separado meses después de su boda por una más que evidente infidelidad, ¿implica que tu dejes de sentirte triste por tus crecientes discusiones con tu pareja?
De nuevo, con este tipo de mensajes, están penalizando nuestra tristeza (No tienes suficientes motivos para estar así), por lo que lo único que están incentivando es que nos sintamos peor de lo que estábamos. Y mucho peor, además de tristes, ¡culpables e idiotas por sentirnos así!
Viene de la mano del tan utilizado Pero si eres guapo, inteligente, tienes salud, una familia que te quiere y unos amigos que….
Qué tal si pruebas a decirle: Permítete estar triste, no eres ni peor cuando estás triste ni mejor cuando irradias felicidad. En cualquiera de los casos, ¡eres humano!. La tristeza no es vulnerabilidad, no le hagas sentir que tiene un problema por sentirse así.
3. No estés así hombre, sonríe, sal por ahí…
De nuevo, un mensaje que te fuerza a que salgas lo antes posible de tu mísero estado y precipitando cambios superficiales, que poco pueden tener que ver con sentirte mejor interiormente.
¿Qué tal si le das permiso para que esté así el tiempo que necesite hasta cargar las pilas? Ten presente que la tristeza es semejante al modo avión de tu dispositivo móvil. Es necesario para no consumir tanta batería, impedir que nos aceche un bombardeo de mensajes y poder gozar más adelante del modo on.
Tantea con Haz lo que te apetezca, sólo faltaría. No tengas prisa, si no quieres salir, no lo hagas. Y si quieres usar la paradoja, prueba con Te recomiendo de hecho que no salgas y que estés todo el día en casa. En épocas de apatía es mejor no hacer ningún tipo de plan y ver al mínimo de personas posibles. Probablemente, en el momento en que le des permiso de estar así y le prescribas permanecer en la tristeza, saldrá por sí solo en tiempo récord.
Sandra Ferrer
Psicóloga
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