Si eres un fumador ocasional o un fumador empedernido, hay una gran cantidad de cosas que pueden crear el impulso (disparador) para que te fumes uno. Cuando se intenta dejar de fumar, es importante que conozcas estos desencadenantes para que puedas estar preparado si te llegas a topar con uno. Estos 10 causantes del tabaquismo que te mostrare a continuación los voy a dividir en 2 partes: los mas comunes y los que aparecen en situaciones sociales. Primero veamos los mas comunes.
6 Disparadores del tabaquismo mas comunes
Mientras que algunos factores desencadenantes son más poderosos que otros y cada persona es diferente, aquí te enseñare los mas comunes que experimenta cada fumador.
Después de comer
Sobre todo por la rutina, a la mayoría de los fumadores les gusta fumar después de comer, ya sea un bocadillo o una comida completa. Si siente la necesidad de fumar después de haber comido algo, hay varias cosas que puede hacer:
Ponte a hacer algo de provecho inmediatamente después de comer:
Limpia donde comiste y tira la basura que hayas generado.
Lava los platos (es difícil fumar cuando las manos están mojadas).
Limpia tu boca bebiendo un vaso de agua.
Date un descanso antes volver a lo que estabas haciendo antes de comer.
Al despertar
Nuestro cuerpo comienzan a desear mas la nicotina cuando dejamos de fumar que cuando lo hacíamos. Durante una noche de sueño, ya que no se han fumado cigarrillos, el cuerpo naturalmente comenzará a experimentar los síntomas de la nicotina. Algunas personas dejan sus cigarrillos a un lado de su cama para que inmediatamente después de despertarse puedan fumarse uno. Otros tienen una rutina matutina que los lleva a esa primera calada. Cualquiera que sea tu horario habitual, hay formas de cambiarlo y ayudar a eliminar esta tendencia:
Cambia tu rutina matutina.
Dúchate y cepilla tus dientes inmediatamente.
Duerme un poco mas. Esto Acortara el tiempo que te permitía fumar antes de salir de casa.
Mientras Conduces
Como muchos factores desencadenantes, conducir es más un disparador basado en la rutina. A menudo, los fumadores se encienden detrás del volante, por puro hábito. Para combatir este impulso:
Limpie a fondo (o retire) cualquier cenicero en el vehículo y cualquier recuerdo residual de fumar
Asegúrese de que no haya cigarrillos en el vehículo.
Baje las ventanas y respire profundamente.
En el teléfono
Si siempre fuiste fumador, es probable que hayas tenido momentos en los que hayas encendido más de un cigarrillo. Esto se debe a que no es un cigarrillo que su cuerpo necesita; más bien es uno de rutina y hábito. A menudo, cuando estamos hablando por teléfono, le prestamos poca atención a lo que sucede a nuestro alrededor y es por eso que de forma distraída encendemos más de un cigarrillo. La próxima vez que estés en el teléfono:
Siéntate en lugar de caminar. Manténgase enfocado en su conversación telefónica.
Asegúrese de que no haya recordatorios físicos de cigarrillos a su alrededor, como ceniceros, encendedores, paquetes vacíos o aromas.
Mantenga sus conversaciones telefónicas cortas.
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Cuando tomas café / té / bebidas alcoholicas
La nicotina a menudo se asocia con experiencias comunes. Para la mayoría de los fumadores, tomar una taza de café o té por la mañana o una bebida por la tarde / noche desencadena la asociación automática de experiencias anteriores. Es importante reemplazar estas asociaciones por otras nuevas, así que la próxima vez que disfrutes del tiempo libre, no te sorprenderá este desencadenante común.
Mantenga un vaso o una botella de agua y beba con frecuencia.
Considere adoptar una bebida “usual” diferente.
Recline su mente para saber que la nicotina cambia los sabores de todo lo que come o bebe. Esto puede ayudar a tu cerebro a construir una asociación diferente.
Cuando tienes hambre
La nicotina es un supresor del apetito por lo que los fumadores que tienen hambre tienden a fumar, en lugar de comer para controlar su apetito. Mientrasaumento de pesoes una preocupación común para las personas que están tratando de dejar el hábito, hay muchas maneras saludables de estar preparados para este desencadenante.
-Ten siempre a mano un refrigerio saludable bajo en grasa.
-Bebe agua.
-Mastica un poco de chicle o ten a la mano un chicle de menta.
-Come algo que sea saludable.
Estos son solo 6 desencadenantes de fumar comunes que podrían alejarte de tu objetivo de dejar de fumar. En términos generales, si alguna vez experimentas estos o cualquier otro desencadenante, el aire y el agua son perfectos para ayudarte a mantenerte enfocado. Es decir, respira hondo y bebe un vaso de agua.
Bueno, ya conoces los disparadores mas comunes, pero hay otro tipo de disparadores que suelen aparecer cuando estas en una reunión con tus amigos. Veamos cuales son.
4 disparadores sociales que te mantienen enganchado
Fumar es más que una rutina cómoda. Para muchos, es una muleta social que te ayuda a sobrellevar las interacciones cargadas de emociones, los argumentos, las celebraciones e incluso el agobiante peso de la soledad.
Si quieres dejar de fumar, debes reconocer los factores desencadenantes que te atraen a encender. ¿Dónde estás cuando ocurre la urgencia? ¿Qué estás haciendo? ¿Con quién estás? Qué estás pensando? ¿Cómo te sientes?
hablamos sobre las influencias menos habladas que nos empujan hacia un cigarrillo. Cuatro de esos factores desencadenantes están fuertemente influenciados por las interacciones sociales, o la falta de ellas.
Esconderse: las fiestas pueden ser incómodas, especialmente si estás solo o no particularmente extrovertido por naturaleza. Es difícil iniciar conversaciones con completos extraños. Como fumador, tiene una salida, una distracción, una forma de llenar el tiempo hasta que alguien entre con un inteligente iniciador de conversación. Es un escape, un escondite y un alivio a veces bienvenido del bullicio de una fiesta. De hecho, ¡los cigarrillos a veces son el iniciador de la conversación! Pedir un encendedor o un cigarrillo, o que se le pregunte, crea una conexión automática, una característica común, que puede romper el hielo en una situación extraña.
La soledad: Un cigarrillo puede ser un compañero bienvenido cuando tus amigos no están cerca. Esto es más común de lo que las personas se dan cuenta. Fumar puede distraer su mente de la ausencia de otros, pero es importante reconocer que las distracciones no son soluciones.
Argumentos: las confrontaciones verbales pueden ser emocionalmente discordantes. La ira, la frustración y la desilusión son todas excusas fáciles para que agarres un cigarrillo.
Sentimiento de contenido: Fumar es tanto un evento de celebración como un mecanismo para sobrellevar el estrés negativo. Si bien su rutina diaria determinará cuándo y dónde experimenta la necesidad de fumar , la adicción de su cerebro y el cuerpo a la nicotina no es tan exclusiva. En tiempos buenos o malos, estás condicionado a pensar (inconscientemente) que los cigarrillos lo mejoran.
La gente no fuma 20 cigarrillos a la vez. Fuman cada cigarrillo de a uno por vez. Toman la decisión de sacar uno, llevárselo a los labios, pasar el encendedor y respirar profundamente.
Esta es una decisión consciente, pero está fuertemente influenciada por desencadenantes subconscientes. Al notar los patrones que llevan a tomar un cigarrillo, podrá identificar los momentos individuales que conforman su rutina diaria. Al identificar esos factores desencadenantes, puede mirar a la tentadora a los ojos, analizar las razones por las cuales esta situación lo empuja a fumar y aferrarse a esa realización para la próxima vez. Desde aquí, puedes comenzar a volver a cablear tu cerebro, a redirigir tus pensamientos y sentimientos en respuesta a esos factores desencadenantes , cambiando así las influencias inconscientes que conducen al comportamiento no saludable.
Si te encuentras en una fiesta que quiere escapar, reconoce eso. En lugar de encenderse, tomar una copa, ir a la pista de baile o buscar a alguien amable y saludar. Si estás en una discusión, respira profundamente sin las toxinas, y si te sientes mal, concéntrate en por qué te sientes de esa manera en lugar de cómo puedes escapar de ella.
En lugar de fumar, bebe una botella de agua, mastica un chicle, toma diez respiraciones largas y lentas y aprecia la fuerza de voluntad que está alimentando tu resistencia. ¡Date una plamadita en la espalda! Estás un paso más cerca de ser libre de tabaco. ¡Tus desencadenantes sociales pueden conectarte durante bastante tiempo si no actúas ahora!
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