“La imaginación es una visión preliminar de lo que sucederá en tu vida” dijo Albert Einstein refiriéndose al poder de la atracción, tema a tratar hoy. En el siguiente post le confesaré “el secreto” que diversos personajes relevantes en la historia de la humanidad afirmaron existe. Antes quiero aclarar que me considero una persona escéptica, por lo cual, dudé sobre esta realidad hasta que me pasó. Si usted también lo es, le pido que le dé una oportunidad al tema y lo lea con atención ya que podría cambiar su paradigma. Todos tenemos un poder interno llamado atracción, la capacidad de atraer las cosas que consiste en desear con tanta fuerza algo que con acciones y tiempo se consigue tarde o temprano. Esto no solo aplica con lo material, puede ser personas, actividades, resultados, oportunidades, lo que usted quiera. Solo debe quererlo con todo su ser y lo conseguirá, como dice la famosa marca deportiva “impossible is nothing” y no se equivocó. En el presente post hablaremos de un problema social que limita a las personas, la envidia y cómo puede ser reemplazada por un sentimiento más positivo y productivo como es la admiración. Además, resaltaremos la importancia de tener una meta en nuestra vida, debemos saber a dónde queremos ir, que nuestras acciones tengan un propósito y aporten a lograr el objetivo planteado. Empecemos…
La envidia y el cambio de mentalidad
La envidia es un sentimiento de tristeza o enojo que una persona experimenta al desear tener algo que otra posee. Pero, ¿por qué sentir enojo o tristeza? ¿qué obtenemos al experimentar estos sentimientos? El enojo y la tristeza traen momentos que no queremos en nuestra vida, no aportan, sino perjudican a la salud, el estado de ánimo y el desarrollo personal ¡debemos vivir felices! Imagine dos personas, una con mentalidad pobre y otra optimista. Ellos están yendo por la calle y, de pronto, pasa un auto de lujo. Por la cabeza de las dos personas pasarán diferentes cosas. El primero, mentalidad pobre, pensará ¡maldición! ¿por qué el puede tener eso y yo no? seguro es narcotraficante o está metido en algo ilegal, ojalá se lo roben o lo pierda. Esta mentalidad es propia de una persona tóxica, estancada en su zona de confort, que espera recibir las cosas de manera fácil y no hace nada para salir adelante, solo se pasa su vida quejándose y esperando que el éxito llegue a él sin hacer el mínimo esfuerzo -Uno planta su propio jardín y decora su propia alma en lugar de que alguien le traiga flores-. Por otro lado, la segunda persona, con mentalidad emprendedora, pensará ¡excelente! ¿qué tipo de negocio tendrá para tener ese carro? ¡quiero lo mismo! Incluso podría acercarse y preguntarle al dueño del carro ¿cómo lo consiguió? algún día tendré un auto así o mejor. Las personas con mentalidad positiva, no sienten envidia, saben que si quieren tener lujos deben ir a por ellos, enfrentan la vida e intentan ganar la partida.
Pudimos observar dos tipos diferentes de mentalidades, ¿cuál es la más ventajosa? Asumo quedo claro. Si somos personas que ven a alguien con un objeto de lujo y pensamos “seguro está metido en algo ilegal”. Tenemos una mentalidad de pobre, pero no es grave, esto nos pasa a la mayoría al inicio. Debemos entender que si queremos tener las cosas que tantos soñamos, debemos ir a por ellas, nadie nos va a regalar la vida que tanto queremos, debemos merecernos cada centavo que tendremos y ser felices lográndolo, solo así alcanzaremos el éxito que tanto anhelamos. Una vez que aceptemos esto, cuando veamos a alguien pasar con algún bien de lujo, nos pondremos felices por ellos y no vamos a experimentar ese sentimiento tan desagradable llamado envidia. Además, para poder aplicar la ley de la atracción debemos eliminar todos los malos pensamientos de nuestro interior, una vez que mejoremos nosotros como personas podremos desarrollar este poder en nuestra vida.
La importancia de tener una meta
Todos debemos tener una meta en la vida, es lo que da sentido a esta y nos dirige a lo que mas queremos para nosotros y las personas que nos rodean. Para profundizar en el tema haré una comparación, en un muelle hay dos barcos a punto de zarpar. El primero no tiene una meta y, por lo tanto, se puede pasar muchos años sin llegar a ningún lugar, perdido en el océano. El segundo si tiene una y puede demorarse el tiempo que sea necesario, pero, finalmente, llegará a esta y logrará su objetivo porque sabe a dónde quiere llegar. Es clara la idea, si nosotros no tenemos una meta, un objetivo o un plan, no sabremos a donde ir y estaremos perdidos.
Aproximadamente hace un año, me pidieron que imagine mi día ideal, le pido que haga la misma reflexión y en un papel redacte cómo sería este (importante hacer a mano), tómese el tiempo necesario y piense en las personas que lo rodean, el estilo de vida que quiere llevar y las actividades que le gustaría realizar en este día ¡decida quién será! Todo lo que imagina es lo que más le gusta hacer en su vida, deben ser cosas que lo hagan 100% feliz. Entonces, encontrará muchas motivaciones y pensará en ellas cada vez que quiera renunciar e irse por el camino fácil. A partir de eso tendrá un objetivo, lograr las cosas que escribió y hacerlo requiere tener un plan, las acciones que realice de ahora en adelante, al menos una en el día, tendrán que aportar algo para hacer posible lo que escribió en el papel. Debo recalcar que no existe un camino fácil para el éxito, le anticipo que tendrá que sacrificar muchas cosas y esforzarse, pero que el camino es grandioso porque tiene una motivación en mente, debe poner la mejor actitud en todo lo que haga, así es como se logra tener un plan, objetivo y meta en la vida.
Para empezar a hacer todo lo mencionado en los dos párrafos anteriores, debemos tener una mentalidad de largo plazo, ¿qué quiere decir esto? En la mayoría de los casos, esperamos obtener resultados inmediatos, enfocando todas nuestras actividades en obtener retornos a corto plazo. Pero, como estudiante de finanzas, le puedo asegurar que las mejores inversiones son las que están enfocadas en el largo plazo. La mejor inversión que puede hacer en su vida es usted mismo, leyendo libros, capacitándose cada vez más y aprendiendo nuevas habilidades siempre. La clave está en esfuerzo, aprendizaje, esfuerzo y aprendizaje. No existe otro camino y si seguimos este, tarde o temprano, lograremos el objetivo que nos planteamos en el párrafo anterior, sólo debe quererlo y lo tendrá.
Cómo conclusión quiero expresar que, estoy convencido, a usted también le ha pasado, solo que atribuyó su resultado a otros factores o simplemente no se ha dado cuenta cuando obtuvo lo que tanto anhelaba, solo analícelo. Con este poder de atracción he tenido resultados increíbles y espero que usted lo practique y empiece a obtener resultados positivos ¡se que así será! Confío en que el mensaje haya sido claro, no consiste en solo quererlo con todas nuestras fuerzas, aporta mucho el hacerlo pero querer es poder y para poder no debemos quedarnos de brazos cruzados, manos a la obra y ¡a por nuestros sueños!
Le dejo el documental que me enseñó mi madre hace algunos meses y que me hizo confirmar mi hipótesis y aprender un poco más del tema.
“El secreto” Ley de Atracción el documental.
Will Smith hablando del poder de la atracción Minuto 6:30
Próximo tema: La bendición de tocar fondo.
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Lo invito a comentar alguna experiencia que haya tenido con la ley de la atracción, me motivaría bastante conocer alguno de sus logros personales.
¡Hasta el próximo post!
Fuente: este post proviene de Lecciones de vida, donde puedes consultar el contenido original.
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