Los acúfenos como son conocidos los zumbidos en los oídos en términos médicos, aparecen alrededor de los cuarenta o cincuenta años de edad, y es muy frecuente que sea un malestar que llegue para quedarse, en una edad más temprana ocurre de manera transitoria.
El acufeno o también llamado tinnitus, es un sonido que solo lo escucha la persona en el interior, este ruido suele ser más fuerte en un ambiente donde exista mucho silencio y cuando la persona se distrae en otras actividades se atenúa.
CAUSAS:
Muchas veces, los zumbidos están relacionados con problemas de pérdida de audición, de mayor parte en los sonidos agudos; no quiere decir que los acúfenos y la disminución de la audición vayan estrictamente de la mano, pero si suelen ocurrir a la vez, también pueden estar relacionados con estrés, hipertensión, trastornos psicológicos, etc.
Si después de acudir al médico no se comprueba la existencia de trastornos orgánicos, lo más probable es que nos debamos acostumbrar a vivir con él.
Hoy en día existen algunos medicamentos para combatir los zumbidos, pero las personas que los usen deben tener presente que su efecto solo durará un corto tiempo, y además tienen efectos secundarios nocivos.
El mejor tratamiento que no tiene efectos secundarios y que los puedes conseguir en tu hogar son los remedios caseros, a continuación te presentamos algunos:
1. TRAPO CALIENTE: Con la ayuda de la plancha calentar un trapo y colocarlo sobre el oído que se siente
el zumbido.
2. GERANIO: Se debe realizar una esencia de geranio macerando un poco de esta planta entera en alcohol
de 40 grados, se deja reposar durante 20 días en un lugar cálido. Pasado este tiempo aplicas unas gotas
de esta esencia dentro del oído e inmediatamente se sentirá alivia. Puede repetirse varias veces al día.
3. PEREJIL: Este remedio es de uso externo. En la palma de la mano hacemos una mezcla de perejil y aceite
de oliva, agregamos un poquito de sal e introducimos esta mezcla en el oído.
4. TÉCNICA CON LAS MANOS: Colocar las manos sobre las orejas con los dedos apuntando hacia la nuca,
luego colocar el dedo mayor justo en la parte inferior del cráneo, y golpear con el dedo índice la cabeza
como si se estuviera tocando un tambor durante unos minutos, esto ayudara a mermar el zumbido.
5. CEBOLLA CABEZONA: Tomar ½ cebolla cabezona y licuarla, luego empapamos un algodón con este
zumo y lo colocamos en el oído durante unos minutos.
6. JENGIBRE: Hacer una infusión con la ralladura de la raíz del jengibre y tomarla varias veces al día.
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