Una noche de rumba y beber tragos es una buena explosión – hasta que te levantas a la mañana siguiente con un dolor de cabeza fuerte y un ataque severo de náuseas. Los investigadores no están del todo seguros de qué causa la resaca, pero beber hasta el punto de intoxicarse es sin duda un factor importante.
Aunque una onza de prevención vale una libra de cura en el caso de vómitos causados por una resaca, hay algunas medidas que puede tomar para detener el dolor.
¿Qué está pasando?
Técnicamente llamada veisalgia, una resaca causada por la ingestión de alcohol puede dejar al bebedor con la boca seca, mareos, náuseas, somnolencia y vómitos involuntarios.
Debido a que el alcohol deshidrata el cuerpo, la pérdida de más líquido en el vómito puede exacerbar aún más los síntomas. Al mismo tiempo, el alcohol que aún se encuentra en el sistema es rechazado por los vómitos y puede ser parte de la “cura”, aunque sea desagradable.
Disfrute de algunos carbohidratos
No se vuelva loco al frente de la comida, ya que es probable que empeore sus náuseas. Sin embargo, algunos carbohidratos suaves, como las galletas saladas o las tostadas, pueden ayudar a que su estómago se asiente. Además, comer carbohidratos ayuda a que sus niveles de azúcar en la sangre vuelvan a la normalidad, después de que se hayan agotado por beber demasiado.
Hidrata, hidrata, hidrata
Los líquidos claros ayudarán a mover el alcohol fuera del cuerpo. Las bebidas deportivas con electrolitos, así como el agua pura y corriente, pueden ayudar al proceso y diluir algunos de los efectos. Sin embargo, toma tiempo para que el efecto del alcohol se vaya. Evite el café y las bebidas con cafeína porque actúan como diuréticos, deshidratan aún más su sistema y le dan una falsa sensación de alerta.
Una taza de té de jengibre caliente también puede ayudar a calmar su estómago. Hágalo añadiendo una cucharadita de raíz de jengibre recién rallada a una taza de agua hirviendo. Dejar reposar durante 10 minutos y colar los trozos de jengibre.
Si tiene un poco de hambre, también puede disfrutar de un plato de sopa clara como fideos de pollo o fideos vietnamitas. Esto no sólo repone el sodio, sino que también lo hidrata. Los fideos también ayudan a sus niveles de azúcar en la sangre.
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Respire profundamente
Si todo lo que puede hacer es acostarse en la cama, póngase de espaldas y practique una respiración profunda controlada. Respirar profundamente desde el diafragma activa el sistema nervioso parasimpático, que controla las náuseas. Inspire por la nariz, profundamente en los pulmones, a medida que su abdomen se expande. Exhale lentamente por la boca y relaje el vientre.
Beba agua. Es importante mantenerse hidratado mientras bebe alcohol. Eso significa beber mucha agua entre los cócteles. Si pasas por alto esa regla y te despiertas atontado a la mañana siguiente, bebe para rehidratarte y eliminar las impurezas de tu sistema.
Beba también otros líquidos. Recuerda: El agua no es suficiente. Usted también necesita tomar líquidos ricos en electrolitos, como bebidas para deportistas, agua de coco o sopa de caldo, que pueden restaurar la sal y el potasio que ha perdido.
Engrasa antes de irte. Un remedio popular de larga data es tomar una cucharada de aceite de oliva antes de una fiesta. Algunos juran por ello. Comer una pizza u otro alimento graso tiene el mismo efecto. Se dice que ambos engrasan los intestinos para que el alcohol tarde más en absorberse.
Consuma azúcar mientras bebe. Los estudios demuestran que la fructosa puede acelerar el metabolismo del alcohol, reduciendo así el riesgo de resaca. Es importante comer azúcar mientras está bebiendo, no antes, ya que la fructosa se metaboliza rápidamente. Pruebe el jugo de naranja natural entre los cócteles.
Llénalo la mañana siguiente. Desayunar. Los electrolitos en los alimentos ayudan a reponer un sistema deshidratado y devuelven las calorías a su cuerpo. Pero ve con cuidado. Aunque una comida grasienta antes de beber puede ayudar, la resaca necesita alimentos fáciles de digerir, como tostadas y cereales. Algunos creen que comer tostadas quemadas ayudará, ya que la corteza de carbón carbonizado filtra las impurezas como un filtro de agua de carbón. Pero no hay ninguna investigación que lo respalde.
Come Jengibre. Durante siglos, la gente ha tomado jengibre para reducir las náuseas y los vómitos. Trate de mordisquear jengibre cristalizado después de una noche de beber. Los Institutos Nacionales de Salud revelan investigaciones preliminares que indican que el consumo de una combinación de jengibre, médula de mandarina y azúcar morena antes de beber disminuye las náuseas y los vómitos.
Esté atento al cactus de higo chumbo. Aunque todavía se está probando, un estudio ha demostrado que tomar 1,600 UI de extracto de higo chumbo cinco horas antes de beber redujo el riesgo de resaca severa en un 50 por ciento.
Vuelve A La Cama. La resaca no es causada por la falta de sueño, pero eso la empeora. Duerma una larga siesta al día siguiente: Es la forma en que el cuerpo se cura a sí mismo.
Entre siesta y siesta, rehidrata y restaura con una receta bien popular ya que Devuelve el almidón, el azúcar, el sodio y el potasio a su sistema agotado.
Es la que sigue: Mezcle 1 cucharadita de sal y 8 cucharaditas de azúcar en 5 tazas de agua destilada.
Bata en 1/2 taza de jugo de naranja o ¼ taza de puré de plátano.
Beba la mezcla lentamente durante todo el día, guardándola en un lugar fresco. Está bien por 24 horas.
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