El tener un buen o mal día, o el convertir un mal día en uno bueno depende de ti, de cómo te sientas, y de cómo podrás revertir la situación. Muchas veces tenemos un mal día, en nosotros esta aceptarlo o cambiarlo.
Ante la misma situación, las personas no actúan de la misma manera. Mira para que te des cuenta te pondremos estos ejemplos, para que tú mismo determines que tipo de persona eres, lo importante es que seas honesto contigo mismo. De esa manera sabrás que hacer cuando tienes un mal día.
Persona negativa
Una persona negativa se deja abatir por su pesimismo, le abre paso al desánimo y la desazón. En este caso las personas naturalizan el tener un "mal día" y lo hacen parte de su vida. Eso hace que inviten a los malos días a instalarse y a quedarse en su vida, porque consideran que son propios, que eso es lo que merecen.
Persona positiva
Una persona positiva en cambio, toma al toro por las astas. Se hace cargo de la situación, y pone todo de sí para transformar un mal día en un día estupendo. Después de todo un día de tu vida es mucho para cederle al enojo y a los pensamientos negativos.
¿Y tú qué tipo de personas eres positiva o negativa?
Si eres una persona negativa pesimista, no te conformes con lo que tienes, ve por más. Trata de cambiar tus estructuras y de hacerlas mucho más flexibles. Aprende a reír y a disfrutar de la vida, esto no es sencillo, lleva un trabajo arduo y profundo de tu parte.
Pero cuando al fin se logra, todo se convierte en un dulce triunfo que ganamos por propio merecimiento, por haber trabajado muy duro en conseguir lo que nos apetecía.
El que hacer cuando tienes un mal día no siempre está en nuestras manos, a veces la situación se nos escapa y perdemos el eje.
Lo importante es que lo intentemos a como dé lugar, eso nos permitirá salir airosos, satisfechos con nosotros mismos por haber hecho lo posible.
Qué hacer cuando tienes un mal día
Cuando que hacer cuando tienes un mal día debes aceptarlo. No lo tomes el tener un mal día como una catástrofe, es solo un obstáculo en tu vida, un problema a resolver. Y de seguro tu podrás hacerlo.
Focalízate en el problema cuando tengas el problema y no antes. Hay personas que ante determinada situación imaginan el desenlace. Pues no debes adelantarte a los acontecimientos, no puedes planear como actuaras en una situación que aun no ha ocurrido.
No pierdas tiempo en amargarte, o hacerte daño por el problema, pon todas tus energía para resolverlo.
Debes darle a cada cuestión la importancia que tiene, ni más, ni menos
Lo importante es que no dramatices, ni te victimices. Aunque creas que tú eres la única persona sobre la tierra que tienes problemas, no es así.
Todos en mayor o menor medida, tienen problemas y conflictos, la diferencia está en cómo se toman estos problemas y sobre todo en cómo se resuelven.
Lo importante es que tomes una actitud positiva ante la vida, y le des a cada cosa el justo valor que debe tener.