Aunque nuestro cuerpo sea pura química, esta es de origen natural y los fármacos no lo son, por lo que no siempre son la mejor solución. ¿Alguna vez has oído el famoso dicho “La Naturaleza es sabia”? Pues bien, es una afirmación que deberíamos hacer nuestra más a menudo.
¿Sabías que hoy en día el 80 % de la población mundial utiliza las plantas medicinales como remedio para una enfermedad? A pesar de que la cifra es muy alta, según el Dr. José Luis Berdonces, no hace mucho tiempo el 100 % de la población utilizaba las plantas medicinales como remedio para una enfermedad.
Aunque no lo sepamos o no nos demos cuenta, muchas de las plantas que tenemos a nuestro alrededor tienen infinidad de beneficios para nuestra salud. Plantas medicinales. Guía de remedios naturales del Dr. José Luis Berdonces es el manual perfecto para dejar de sufrir dolencias, curar enfermedades o incluso ayudar a nuestro sistema inmunitario a sentirnos mejor.
¿Verdad que ahora quieres saber más? Pues aquí tienes algunos ejemplos, sigue leyendo…
La matricaria: la primavera la sangre y las migrañas alteran.
Los cambios de temperatura, las alergias o la falta de descanso acumulada son algunas de las razones por las que muchas veces sentimos el famoso “hastío primaveral”. Esto muchas veces provoca en nuestro cuerpo una sensación de cansancio extremo que deriva en uno de los dolores más conocidos de la población: la migraña.
Lo hemos probado todo para paliar sus síntomas: la oscuridad, una toalla en la cabeza y una gran cantidad de fármacos, pero ¿sabes cuál es la planta perfecta para aliviar sus síntomas? ¡La matricaria!
Aunque por el nombre no sepas muy bien de qué planta se trata, la has podido ver muchas veces en el campo aunque hayas pensado que era una margarita silvestre. ¡Pues no! Es una matricaria y es perfecta para esos dolores de cabeza que no eres capaz de quitarte de encima.
Su acción se recomienda para las migrañas debido a acción del partenólido, este es el antagonista de la serotonina y actúa reduciendo la vasoconstricción cerebral.
Aplicación (importante):
Por vía externa es moderadamente irritante sobre la piel y, especialmente, sobre las mucosas.
Otras aplicaciones:
Esta planta medicinal se puede utilizar también en casos de flatulencia, parásitos intestinales y menstruaciones irregulares.
El árbol de té para las heridas de guerra
Dicen que las heridas y las cicatrices son las que realmente determinan quienes somos en realidad y poco a poco hacen nuestra propia historia. Pero, aunque las cicatrices puedan ser “buenas”, las heridas hay que curarlas. Y para ello es perfecto el árbol de té.
Esta planta medicinal es perfecta para curar las heridas y tiene una curiosa historia detrás. Si nunca has oído hablar de esta planta medicinal pensarás que viene del té, ¡pues no tiene nada que ver con él! Su nombre se lo puso el Capitán Cook, que cuando realizó su primer viaje a Australia vio que consumían esta planta en infusión como si de un té se tratase. Pero no, no es té.
El árbol de té tiene un importante poder antibiótico, bactericida y bacteriostático, tiene acción cicatrizante, antiséptica y es muy útil para las picadoras de insectos, abrasiones, cortes y heridas en general.
Aplicación (muy importante).
Es muy importante no aplicar su aceite esencial puro, debes diluirlo con agua para realizar inhalaciones o para lavar las heridas. Su aceite esencial es poco irritante para la piel y las mucosas, por ello se utiliza más como antiséptico.
En el libro del Dr. José Luis Berdonces, Plantas Medicinales. Guía de remedios naturales, podrás encontrar todo tipo de plantas para todo tipo de dolencias. No olvides que la naturaleza es sabia y en ella podrás encontrar siempre respuesta que necesitas.
Fuente: este post proviene de Cocina con Oberon, donde puedes consultar el contenido original.
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