Desde niños nos hemos acostumbrado a respirar de forma automatizada sin pensar si la forma en la que lo hacemos aporta beneficios a nuestro organismo más allá que el de mantenernos con vida.
Una buena respiración debe hacerse siempre por la nariz, ya que en el interior de nuestras fosas nasales hay unos filtros que se encargan de retener pequeñas partículas que podrían resultar dañinas para nuestro organismo, calentar el aire si éste es demasiado frío, etc.
Además, al respirar por la boca permitimos el paso del aire sucio directamente a los pulmones lo que provoca un descenso de defensas para combatir enfermedades y pudiendo debilitar las glándulas, cuerdas bocales, etc. arriesgándonos a contraer infecciones y enfermedades contagiosas.
El prâna es el aire que respiramos y que nos aporta sensación de frescor y bienestar. No hay más que imaginarnos caminando por el bosque o a la orilla del mar para comprender lo placentero que resulta respirar el aire puro. Pero para absorber el prâna hay que aprender a respirar por la nariz.
La respiración diafragmática y profunda es la que mejores beneficios aporta a nuestro organismo, ya que con ella movemos el diafragma (un músculo que se encuentra dividiendo la cavidad torácica de la cavidad del vientre). Con esta respiración llenamos los pulmones con mayor cantidad de oxígeno que con la respiración media o con la clavicular, de las cuales hablaremos en futuros posts.
Con la respiración diafragmática logramos una mejora en el funcionamiento de nuestro corazón aumentando el bombeo de sangre, regulamos el funcionamiento de los intestinos (al producirse un masaje interno de los órganos) y disminuimos la presión arterial ya que se produce un estado de relajación.
Para comenzar a practicar este tipo de respiración debes tumbarte boca arriba y colocar una mano encima de tu vientre. Al inspirar el estómago debe hincharse como una pelota y al espirar debe volver a la posición de inicio. Poco a poco irás automatizando este proceso y podrás realizar la respiración abdominal en cualquier situación en la que te encuentres.
¿Te animas a sentirte mejor?