Muchas veces sientes hambre, mucha hambre, te comerías todo lo que pusieran por delante. Pero… ¿estás seguro de lo que realmente sientes es hambre?
¿Hambre o sed?
Puede que esta pregunta te extrañe, pero muchas veces confundimos el hambre con sed.
¿El motivo?, el mecanismo de la sed es muy débil, y a medida que pasa el tiempo o tenemos peores hábitos alimenticios funciona peor. Por eso es habitual que en verano muchos ancianos estén deshidratados.
Confundir la sed con el hambre también es más habitual entre las personas que toman muchas calorías vacías. Es decir que si tomas muchos alimentos poco nutritivos como la comida basura, refrescos o alcohol, tienes más papeletas para confundir estas dos sensaciones.
La sed es una respuesta química a un cambio de temperatura y fluidos en nuestro cuerpo, y la señal de que tenemos que beber algo nos llega a través de la grelina y la leptina, las mismas hormonas que nos avisan de que tenemos hambre, pero mientras que la sensación de hambre suele estar condicionada por nuestros hábitos y por las emociones la sensación de sed se da únicamente por necesidades fisiológicas.
¿Pero realmente es tan común confundir el hambre con la sed?
Para que te hagas una idea de lo habitual que es confundir el hambre con la sed, un estudio de la Universidad de Washinton, en Estados Unidos, ha demostrado que un vaso de agua calmaría la sensación de hambre nocturna en casi la totalidad de casos en los nos despertamos con ganas de asaltar la nevera en mitad de la noche.
Y una vez que hemos explicado todo esto llegamos a lo más importante. ¿Cómo puedo distinguir si lo que realmente tengo es sed o hambre?
Cómo distinguir si tengo hambre o sed:
Si notas acidez estomacal lo más probable es que tengas sed y no hambre. La acidez nos avisa de la falta de agua.
Cuando creas tener hambre, sobre todo si hace mucho que no has bebido. Fíjate en la sequedad de la boca y la garganta, si las notas algo secas seguro que no es hambre lo que sientes, es sed.
Si notas debilidad muscular o te notas cansado prueba a beber un vaso de agua. Este es otro de los síntomas que nos avisan de que tenemos sed.
Intenta recordar la última vez que has bebido, si ya han pasado un par de horas, opta por beber un vaso de agua porque lo más probable es que lo que sientes sea sed.
Controla tu orina, si crees que estás orinando poco o tu orina es muy oscura necesitas beber agua.
¿Notas la piel seca?, si tu piel está seca suele ser un síntoma de deshidratación y necesitas beber.
TRUCO:
Cuando no tengas claro si lo que sientes es hambre o sed bebe un vaso de agua y espera unos 10 minutos. Seguramente la sensación de hambre que tenías se te pasará en más de la mitad de los casos
Vale, y si muchas veces lo que tengo es sed… ¿por qué se me pasa al comer algo?
Es cierto que muchas veces, aunque confundamos la sed con el hambre, al comer se nos pasa, ¿por qué?. Muy sencillo, normalmente acompañamos la comida con líquidos, además de los propios líquidos que poseen los alimentos, por lo que acabamos saciando la sed.
Si alguna vez nos hemos equivocado y hemos comido cuando lo que realmente necesitábamos era beber, al ver saciada la sensación de sed que teníamos (aunque no lo supiéramos), volveremos a cometer el mismo error una y otra vez. ¿El resultado?… un exceso de calorías totalmente innecesario.
Algunas famosas con cuerpos envidiables, como Elsa Pataky, no dudan en defender el hábito de beber dos vasos de agua antes de las comidas para no “comer por comer” si lo que realmente tienen es sed.
Recuerda que la sed es un síntoma de deshidratación y no debemos llegar nunca a él.
Si quieres ampliar la información sobre cuanto debes beber y cómo funciona el agua en nuestro organismo no te pierdas este artículo
.
Fuente: este post proviene de Operación Bikini, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: