El pepino es el ingrediente estrella de un variado y nutrido número de recetas, a cuál más veraniega: gazpacho, salsa tzatziki, etc.
No faltan razones para incluir esta hortaliza de verano en nuestra alimentación, puesto que ayuda a compensar las dietas excesivamente ricas en sal y en grasas.
El pepino está formado por un 95% de agua. Si a esto le sumamos su nulo aporte en grasas, entenderemos por qué se incluye en todas las dietas de adelgazamiento.
Ayuda a saciar nuestro apetito, con un mínimo de calorías (dado que una unidad de (150g) sólo aporta aproximadamente 16 Kcal).
Además, gracias a su extraordinaria fuente de silicio, vitamina C y aceites esenciales, es una cura rejuvenecedora, ya que sus propiedades, ayudan a hidratar y suavizar la piel, embellece el cabello y endurece las uñas. Como fuente de vitamia E, esta hortaliza es un eficaz antioxidante, que favorece la protección contra la radiación solar.
Contiene potasio, el cual compensa (aunque sólo sea en parte), el alto porcentaje en sodio del queso y las conservas de pescado o embutidos que usamos en nuestras comidas, de esta manera, es muy recomendable para pacientes con problemas de hipertensión.
Por su mayor concentración de fitoesteroles, sustancias que se encuentran en la piel, nos ayuda a controlar nuestro colesterol y proteger nuestro intestino.
No obstante, a pesar de su bajo aporte en fibra, también actúa como un excelente laxante natural debido a su elevado contenido en agua y erepsina (componente que contiene el pepino, que actúa como desintoxicante, y puede ser de gran ayuda para trastornos de vesícula o riñón); además, contiene una enzima que ayuda a digerir mejor las proteínas de la carne y ejerce un efecto “limpiador” en el intestino.
¿Para qué podemos usar el pepino?
En salsas de yogur y pepino con ajo y menta picada (alternativa muy sana, sabrosísima y mucho más ligera que la mayonesa)
En el bocadillo, en finas rodajas, nos aportará un toque crujiente a nuestros bocadillos.
Ensaladas, etc..
¿Te suele sentar mal el pepino?
En este caso, te aconsejamos que lo peles, ya que la piel de esta hortaliza, contiene unas sustancias amargas que pueden ser indigestas; y además, deberías comerlo sin sal y sin vinagre.
Datos de interés
Generalmente, esta hortaliza se consume como un ingrediente más en ensaladas; pero, os aconsejamos que dado a los numerosos efectos beneficiosos que tiene en nuestro organismo, es recomendable añadirla con mayor frecuencia a nuestros platos.
Fuente: este post proviene de La maleta de Maggie, donde puedes consultar el contenido original.
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