Cada vez son más los tipos de drogas que se pueden consumir y también las personas que las consumen. ¿Qué está pasando? ¿Por qué necesitamos tanta sustancia que nos “altere” la realidad en la que vivimos? Quizá estemos viviendo una vida que está totalmente fuera de lo que de verdad queremos y, al no sentirnos capaces de cambiarla, intentamos evadirnos consumiendo drogas y alcohol.
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Las drogas más conocidas
El alcohol
En muchas culturas el hecho de consumir alcohol es sinónimo de mayoría de edad. Muchos jóvenes están deseando llegar a la edad en la que puedan consumir alcohol legalmente. Creemos que el hecho de consumir alcohol es algo que no tiene demasiados perjuicios porque casi todo el mundo lo hace. Sin embargo, estamos hablando de una sustancia muy perjudicial para la salud. El alcohol tiene muchos efectos negativos para el cuerpo humano y las cantidades en las que lo consumimos son bastante grandes.
Un estudio publicado por una sucursal de la revista Nature, hizo una cuantificación del riesgo de muerte asociada a distintas drogas. El estudio indica que, el indice de toxicidad en relación al consumo humano, promedio, hace que se considere el alcohol un poco más peligroso que la heroína y 114 veces más que el cannabis.
Aunque el alcohol sea legal en la mayoría de los países occidentales no podemos decir que no nos ocasione problemas. Se ha podido comprobar en animales de laboratorio que esta sustancia aumenta los niveles de dopamina en el sistema de recompensa cerebral entre un 40 y 360%. Así mismo, se sabe que el 22% de las personas que toman alcohol desarrollarán dependencia en algún momento de su vida.
La cocaína
La cocaína interfiere en el uso que nuestro cerebro hace de la dopamina para transmitir mensajes de una neurona a otra. Podríamos decir que, básicamente, impide que las neuronas desactiven la señal de la dopamina. Este impedimento causa una activación anormal en el circuito de recompensa del cerebro. Se calcula que entre 14 y 20 millones de personas consumen cocaína en el mundo.
Según los expertos, el crack se considera como la tercera droga más perjudicial y la cocaína en polvo, que tiene un efecto más suave, la quinta. Esta droga, que cada vez se hace más accesible, es parecida a otros estimulantes adictivos como la metanfetamina y la anfetamina.
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La heroína
La heroína esta considerada como la droga más adictiva. Esta droga es un opiáceo que eleva el nivel de dopamina del sistema de recompensa del cerebro hasta 300%. Además de su alto poder adictivo, también es una droga sumamente peligrosa ya que la dosis que puede causar la muerte es solo cinco veces mayor que la que una persona utiliza normalmente.
Así mismo, la heroína se considera como la droga más nociva ya que causa tanto daño a los consumidores como a la sociedad.
Los barbitúricos o tranquilizantes
Este tipo de drogas se conocen también como “bombones”, “caramelos”, “demonios azules”, etc. Se trata de drogas que, en un principio se utilizaron para tratar la ansiedad e inducir el sueño. Crean interferencias en las señales químicas que el cerebro envía por lo que, diferentes regiones del cerebro dejan de funcionar. Si se toman en dosis bajas producen euforia. Sin embargo, tomadas en dosis altas pueden ser letales. Esta droga es considerada como la cuarta sustancia más adictiva.
La nicotina
Esta sustancia está considerada como la tercera más adictiva. Cuando se fuma un cigarro, la nicotina se absorbe rápidamente por los pulmones y se transmite al cerebro. Son muchas las personas que fuman alguna vez y después pasan a ser dependientes. Según la Organización Mundial de la Salud se prevé para 2030 que el tabaco acabe con la vida de más de ocho millones de personas al año.
Daños que causan las drogas a la persona que las consume
Entre los daños físicos causados por el consumo de drogas se encuentran:
– Mortalidad. Puede ser específica según la dosis y relacionada por los efectos derivados de su consumo como accidentes de tráfico, cáncer de pulmón, suicidio o VIH.
– Enfermedades derivadas del uso de drogas: cirrosis hepática, derrames cerebrales, úlceras gástricas, convulsiones, etc.
– Daños que tiene que ver con las consecuencias de ingerirlas: autolesiones, actividad sexual no deseada, virus de transmisión sanguínea, enfisema, etc.
Por supuesto, también las personas que consumen drogas sufren daños psicológicos:
– Dependencia: necesidad de seguir utilizando la droga a pesar de las consecuencias negativas.
– Funcionamiento mental deteriorado: Intoxicación por ketamina, psicosis inducida por anfetamina. Trastornos del estado de ánimo y del estilo de vida.
Los daños sociales son:
– Perdida de bienes personales: trabajo, vivienda, logros educativos, etc
– Perdida de relaciones personales: Familia y amigos.
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Daños que causan las drogas a terceros
El consumo de drogas no solo causan daños a las personas que las consumen y sus allegados.
– Se pueden producir daños físicos y psicológicos a otras personas: Violencia doméstica, accidentes de tráfico, daños fetales, etc.
– También se ocasionan daños sociales: Las drogas impulsan el aumento de la criminalidad, causan daños en el medio ambiente. Provocan también desintegración familiar, carencias económicas, etc.
– Daños internacionales: Las drogas también contribuyen a la desestabilización de los países y a la delincuencia internacional.
– Gasto económico: Los gastos en sanidad, seguridad, servicios sociales, etc se incrementan en gran medida de manera directa. De manera indirecta, se produce una pérdida de productividad. absentismo laboral, etc.
– Disminución de cohesión social. La comunidad pone en riesgo su cohesión y su reputación cuando hay problemas de drogadicción.
Las drogas son un verdadero problema para nuestra sociedad. Como hemos visto, sus efectos nocivos tocan todos los rincones de nuestra vida. Si vivimos de una manera más consciente es mucho más difícil que necesitemos consumir este tipo de sustancias.
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