Otros de los factores que influyen en el descontrol del apetito son la soledad y el insomnio. En estos casos, además, no solemos consumir alimentos sanos sino que, nos decantamos por comidas grasas como los embutidos o dulces como el chocolate.
Para luchar contra este hábito de descontrol del apetito lo mejor es optar por alimentos como la avena y el maíz, los plátanos, los frutos secos, el pescado azul, la leche, el tomate o el brócoli. Estos calmarán tu apetito a la vez que saciarán tu estómago. Además, tienen propiedades relajantes para combatir los nervios y el insomnio.
Para acompañar estos alimentos nada mejor que unos buenos consejos:
- En el momento en el que notes aburrimiento y que tu mente se pone a buscar qué tienes en la nevera, distráete con algo. Llama a un amigo o saca al perro a pasear. De esta forma evitarás lanzar al estómago el mensaje de que tienes hambre.
- Si no puedes controlar le picoteo escoge alimentos que, por lo menos, te aporten nutrientes en lugar de grasas. Opta por los pepinillos en vinagre, los palitos de cangrejo o los frutos secos.
- Si lo que te empuja a la nevera es la soledad o añoranza introduce en tus platos principales comidas que te recuerden a tu familia o infancia. De esta forma ya no te hará falta desahogarte entre horas.
- Ten cuidado si cocinas para ti solo. Esto puede producir que no cuides tanto las comidas y acabes conformándote con cualquier cosa, un simple sándwich o una ensalada, lo que hará que a media tarde te entren muchas ganas de picar algo.
Comer es esencial para el organismo y para tener una buena salud pero, comer por comer, y además grasas y azúcares, puede causarnos sobrepeso y problemas. Controlarlo está en tu mano y, siguiendo estos sencillos consejos, ¡seguro que lo consigues!